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INTRODUCCION
Mi nombre es Luisan Gómez Hermoso y empecé a viajar "Fuera de Ruta" hace ya 21 años. He convivido, fotografiado y me he enriquecido culturalmente durantes mis viajes con diferentes pueblos, tribus y etnias por el mundo, casi siempre solo (un 90% de los viajes), viviendo muchas, y en algunos casos, difíciles situaciones que afortunadamente salieron bien, aunque en ese camino hubo muchos sustos y algún que otro disgusto.
En muchos de los países en donde he estado: Panamá, Venezuela, Colombia, Haití, República Dominicana, Marruecos, Senegal, Túnez, Mauritania, Argelia, Gambia, Kenia, Tanzania, Isla Mauricio, India, Sri Lanka, Vietnam, Malasia, Isla de Borneo, Birmania, Camboya, Laos, Irán, Hong Kong, Indonesia, y casi toda Europa, me ha tocado correr, esconderme, curarme de enfermedades graves, e incluso, y por equivocación, me han metido en un calabozo en Ho Chi Min (Vietnam). A cambio de esas experiencias, algunas muy duras, me he llevado grandes alegrías con personas maravillosas que he conocido y que me han dado grandes lecciones de convivencia y humildad, y me han ayudado a entender mejor las religiones, costumbres y diferentes protocolos que rigen otros grupos sociales, aunque muchas veces hayan sido duros de comprender.
Todos estos países los he recorrido por mi cuenta, con mi mochila, sin viajes organizados de ningún tipo, más que con mis libros y mapas. He viajado por el interior de estos países de todas formas posibles: en moto, en avioneta por la selva, he hecho miles de kilómetros en coche por carreteras suicidas, me he movido en trenes del siglo pasado con vías llenas de baches, en canoa por manglares interminables o ríos llenos de curvas sudamericanos, en camello por el desierto durante casi un mes con los Tuaregs o en burro por la selva de Sudamérica.
Todas estas situaciones, que en muchos casos han sido verdaderas aventuras, me han creado una sólida experiencia en muchísimos temas por el que un viajero, de cualquier tipo, de grupo, solitario o mochilero, ha de enfrentarse diariamente, bien a la hora de comprar, para dormir, para saber estar ante muchas situaciones, ante enfermedades, y muchos más temas que en este entretenido libro os desarrollo. En estos textos que a continuación podéis leer, muestro algunas partes del libro que he escrito y registrado sobre consejos prácticos para viajar fuera de ruta, aunque también sirven para todo tipo de viajes.
Las pocas fotos que muestro son una visión de la realidad, son instantáneas que retratan momentos, reflejos de un entorno, unas veces alegres y hermosos y otros, bastantes tristes, pero sólo de una parte de los países en donde he estado.
Espero que disfrutéis de este blog como yo he disfrutado en estos países.
VIVENCIAS Y CONSEJOS EN ESTOS VIAJES
1º.- COMO HACER UNA MOCHILA O MALETA
Os voy a contar algún truco para que no se os olvide nada cuando organizáis un viaje largo o de fin de semana. ¿Cuántas veces os ha pasado o habéis oído que algo se ha olvidado? Hay un método que utilizo desde hace años para ser más práctico y que no se me olvide nada y os puedo garantizar que es cierto: no se me olvida nada.
Yo utilizo dos formas para hacer la maleta o la mochila. Una, pensando mentalmente en mi cuerpo, empezando por los pies hasta la cabeza y nunca saltándome ninguna parte del cuerpo. Esto quiere decir, que en una cama o mesa, o directamente en la maleta o mochila, voy poniendo todo lo que necesito. Este método es muy rápido y eficaz a la hora de hacer una maleta rápidamente. Empiezo así:
CONSEJOS PARA QUE NO SE NOS OLVIDE NADA A LA HORA DE HACER UNA MALETA O MOCHILA.
Visualizo mentalmente mi cuerpo y veo lo que necesito en ese viaje. Empiezo por los pies, y pienso en lo que me va a hacer falta:
- Pies: Medias, calcetines de vestir, deportivos o de treking, chanclas baño o de treking (cojo lo que necesite), zapatos o zapatillas, etc.
Lo que pienso y necesito lo voy cogiendo, siempre con orden. Si digo chanclas, voy a por ellas y las coloco dentro de la maleta o mochila, o encima de donde esté poniendo todo. ESTO ES MUY IMPORTANTE, es mejor no pasarse nada y no decir la frase “luego lo cojo”. Al final se nos olvidará. Luego sigo con otras partes de mi cuerpo.
-Piernas: Pantalón largo, corto, traje de baño o pantalón deportivo, pijama, etc.
- Caderas: Calzoncillos, cinturones, etc.
- Extremidades superiores: Camisas de vestir. Polos, camisetas de manga corta, larga o de tirantes, camiseta de montaña o polares, chubasquero o ropa de abrigo, chaquetas, etc.
- Cabeza: Gorro, de sol, de baño, sombrero, gafas de sol o de ver, etc.
Muchas veces he tenido que hacer una maleta rápida de fin de semana y con este método no se me ha olvidado nada.
OTRA FORMA DE HACER UN AMALETA O MOCHILA ES HACER UNA LISTA.
Cuando llevas muchas cosas es aconsejable. Esta la confeccionas una vez y te sirve, variando alguna cosa dependiendo del destino, para todos los viajes. Esta lista que a continuación os muestro es una de tantas que he hecho y guardo en mi ordenador año tras año, viaje tras viaje, y que sólo he modificado en función del país de destino o de aventura.
El método que utilizo es el de la organización. Hago tres columnas, una donde pongo “VARIOS”, en donde escribo todo lo que necesito, que no sea ni ropa ni salud e higiene, otra columna con “ROPA” y otra con “HIGIENE Y SALUD”. Cada cosa la voy poniendo en su columna por escrito (esto durante días o semanas antes de mi viaje). La voy pasando a ordenador para no se me pierda y así tenerla para otros viajes. Una lista mía sería la siguiente, la del viaje a la selva de Borneo, por ejemplo.
1º.- VARIOS
Aquí voy metiendo diferentes tipos de cosas que voy a necesitar, como, linterna, video, Cargador, Baterías, Mando, Cámara Fotos, Cargador cámara, Baterías, Trípode, Cintas video, Tarjeta de cámara de fotos, Alicate-navaja, Gafas de sol, Gorra, Cartera monedero, Cinturón falso, Riñonera plana, Costurero, Guía de viaje, Diario de viajes, Libro lectura, Cinchas para atar la mochila, Discman + cascos + Funda, MP3, Pasaporte, Visas, DNI, Billetes de avión y tren, Euros, etc.
2.- VESTIMENTA
Zapatillas Treking, Botas treking, Chanclas baño, Calcetines deportivos, Traje de baño, Pantalón largo de dos piezas, Nikis, Calzoncillos, Camiseta azul, mosquitera de cara y cuerpo, Chubasquero, Toalla de mano pequeña, Medicinas para regalar, cosas para regalar…..
3.- HIGIENE – SALUD. Crema solar, Antimosquitos Relek, Tiritas, Mercromina, Gasas y Vendas, Tijeras, Cortauñas pequeño, Esparadrapo, Champú-gel, Cuchillas y espuma de afeitar, Aftershave, Muestras de Colonia, desodorante, Clinex…..Botiquín completo y personal.
Todo esto lo meto en una mochila de80 litros y me sobra sitio. Depende de como lo coloques, dobles y lo organices dentro te cabrá todo o no.
¿COMO METER TODAS ESTAS COSAS EN LA MALETA O EN UNA MOCHILA?
En una maleta, como queráis, ya que al abrirla podéis coger y ver lo que necesitéis al momento. Lo único que la ropa que metáis no vaya muy suelta u os llegará totalmente arrugada. En una mochila es muy diferente, meteremos primero en la mochila lo que menos necesitemos durante el transporte: toallas, regalos, calzado, chubasqueros, mosquiteras, etc. Pensad que las mochilas grandes suelen tener una cremallera en la parte baja de la misma. Continuaremos poniendo las cosas delicadas junto a las barras de aluminio de la mochila, donde las asas, de esta forma, en el aeropuerto protegeremos cualquier cosa a la ida o la vuelta del viaje. Seguiremos llenándola por el grado de importancia, así si necesitamos algo lo cogeremos rápidamente, bien por arriba o por debajo, sin necesidad de sacarlo todo.
PARA LA SEGURIDAD DE LA MOCHILA O BOLSOS EN LOS AEROPUERTOS5 milímetros . Con ellas bloquearemos todos los cierres de la mochila, maleta o bolsa de viaje. Como nos sobrará mucha cincha una vez cerrada, la podemos cortar. ¡Cuidado! No se os olvide dejar en un bolsillo lateral de la mochilla o bolso que vayáis a facturar, algo para cortar las bridas en un momento dado (un cortauñas por ejemplo). En el caso de que se os olvide algo o simplemente porque alguien os quiera registrar el equipaje, si no lleváis cerca y fuera, en algún bolsillo, algo para cortarlas, sufriréis por romper la cincha y a lo mejor tenéis prisa. Ya me ha pasado y siempre tienen que ocurrir estas cosas en el aeropuerto cuando más prisa tienes. Lo que guardéis para cortar, no lo hagáis en el equipaje de mano u os lo quitarán cuando os lo registren. No se os olvide.
2º.- FALSIFICACIONES, CAMBIAZOS Y ESTAFAS
¿A quién no le han engañado en alguna compra y le han vendido gato por liebre? A todos nos han engañado alguna vez en estos viajes y creo que te duele más, porque muchas veces no tienes forma de volver a la tienda “a saludar” a quien te hizo la estafa.
Hay verdaderos profesionales de la estafa, del cambiazo y de las falsificaciones. Algunas falsificaciones son muy difíciles de detectar, como por ejemplo las esmeraldas. Las esmeraldas de Colombia son famosas, pero ¿quién es el que entiende y distingue si son buenas o malas estas piedras preciosas? Muy difícil, ya que será una de las piedras preciosas más falsificadas. Tú llegas a la tienda o joyería en Cartagena de Indias (Colombia) y vas a comprar unas esmeraldas con toda ilusión y luego te enteras en España que son falsas o de pésima calidad. Yo creo que lo mejor es no preguntar, entregar el regalo y sonreír a tu pareja como si te hubieras gastado una fortuna.
A parte de las esmeraldas, las falsificaciones hoy en día se dan en todo tipo de productos. Puedes comprar un bolso falso en una tienda de primera o este mismo bolso en un mercadillo en cualquier sitio. Lo bueno es que son perfectos y no los distingues ni por sus acabados. Lo mismo pasa con las copias de relojes de marcas carísimas, o con tallas de madera que te dicen que son de ébano y luego son de otra madera similar, con muebles antiguos que no lo son, con el marfil, que aunque se sigue vendiendo, pese a estar prohibida su venta en casi todo el mundo, te lo ofrecen como auténtico marfil y sólo es hueso tallado, y en definitiva la tecnología y la imaginación de la gente ha hecho que las falsificaciones sean un negocio y para otros, los clientes, una forma de obtener algo, aunque sepas que es falso, y que de otra manera no podrías comprarte.
Podemos llegar a detectar algunas falsificaciones y otras son muy difíciles salvo que seáis expertos.
ALGUNOS CONSEJOS PRACTICOS PARA LAS FALSIFICACIONES.
Una de las maderas más falsificadas y más caras es el ébano. Esta madera preciosa se da en varios continentes, pero el más valioso es el de África. Esta es una madera que se caracteriza por su color negruzco. Lo curioso del árbol de Ébano es que la corteza es blanca o color crema y el corazón es negro. Es de una dureza muy alta, pero se puede tallar muy bien. Una de las cosas para detectar si es auténtica es que en la talla suelen aparecer trozos de la corteza blanca, aunque también la pueden pegar a la madera falsa. Para ver si es ébano o no, primero tenemos que ver que la madera no sea negra del todo, que sea un negruzco con veta, que sea muy pesada, y que al golpearla en alguna parte fina con el dedo u otra cosa, notemos que suena a duro, a macizo, tiene un sonido especial. Normalmente los vendedores, en una figura o talla suelen pegar en la base, que es donde saben que tu vas a mirar, un trozo de ébano auténtico para que veas que al rallarlo es negro ¡Cuidado con esto!. Si puedes raspar o con una navajilla hacer una muesca en otro sitio, detrás de las orejas, en el pelo, el sobaco de la figura o en un sitio que no sea la base, y que no te vea el vendedor, mejor. Toda talla luego tiene su cera, patina o aceite de color oscuro, como todas las maderas son tratadas, pero observad que esa madera no sea casi pintada de negro. En un pueblo de Santander, estaba en un mercado medieval, de una feria, y me paré a ver unas figuras de ébano por curiosidad y para ver si eran de verdad, y cuando cogí una de ellas, la miré y me dice a continuación el vendedor: “son de ébano”. Este chico era español y había comprado esa mercancía a unos africanos. La verdad es que esta vez no pude callarme y le dije al chico joven que eso no era ébano, que el ébano era más pesado y que éstas estaban tintadas de barniz oscuro casi negro y no tenían veta, ni nada. Le hice una prueba en una figura pequeña que me dejó este chico, eran todas iguales. A medida que iba haciendo los raspados y se lo iba probando, éste se sorprendía cada vez más y se iba encendiendo por minutos. Yo creo que todas eran falsas, de madera blanca, no sé que madera pero no era ébano. El chico cerró el chiringuito y se fue a buscar a sus ex-amigos. Esto es muy normal. Una última cosa sobre el ébano. Tenéis que saber que hay más maderas casi negras muy parecidas al ébano, una de ellas la vi en Panamá, era la madera de coco, muy dura, pesada y casi del mismo color.
3º.- SEGURIDAD Y ROBOS,
Este será el mayor de los motivos para fastidiarnos un viaje o darnos un buen susto. Muchas de las cosas que voy a contar son pura lógica y prevención.
Prevenir es la palabra clave en este apartado de robos y seguridad.
Lo primeo es la información de un país. Yo tardo meses en organizar mi viaje, por que viajo solo con mi mochila, y tengo que ser más cauto y previsor que si voy acompañado. Desde luego tardo mucho en organizar mi viaje por que necesito recopilar datos sobre el país al que voy a ir. Investigaré sobre los diferentes recorridos que puedo hacer, las tribus o etnias que puedo visitar, los medios de transporte que voy a utilizar para llegar a ellas, en canoa, en bus, en tren, etc. Me informo de la religión que tienen, y esto me dirá bastante de como es ese país, si es budista ya tengo más cosas a mi favor. Leo artículos en Internet, que es mi mayor fuente de información. Busco lo que ofrecen las guías y, sobre todo, las agencias de viajes de mi destino, también por Internet, consigo rutas de viajes y, de todo esto, saco un montón de datos de lo que quiero y voy a hacer. También obtendré información de como tengo que comportarme ante su sociedad, con sus costumbres, con las compras, de las mujeres, su vestimenta y tradiciones, las comidas, etc.
Me decía un amigo siempre que nos veíamos “El cementerio esta lleno de valientes”. No se si es cierto, por que te puedes morir o te pueden matar en cualquier sitio, pero si se, que si a un viaje por nuestra cuenta e incluso organizado, decidimos salirnos de la ruta y darnos un subidón de adrenalina, ¡cuidado!, nos puede salir muy caro. La experiencia que tengamos en estos viajes de aventuras o por países latino americanos, asiáticos, africanos o por el Brons mismamente, marcara un antes y un después en nuestro comportamiento, pero nunca sabremos como nos vamos a comportar ante una situación u otra. He oído muchas veces la frase: “yo voy por todos los lados y nunca me ha pasado nada”, y yo digo a esa frase “hasta que pasa”. Tarde o temprano nos pasa algo, pero la experiencia nos hará reaccionar de una forma o de otra y esto hará que las consecuencias sean más positivas o negativas. Hace unos años en el norte de la India decapitaron a dos turistas, madre e hija. ¿Que estarían haciendo o donde estarían, para llegar a esos extremos? Yo como viajero, he pensado muchas veces en esas dos pobres mujeres y no lo entiendo. La India no es un país violento hasta ese punto, pero no sabemos que pudo pasar para llegar a decapitarlas. Hace poco, en Borneo, en la selva profunda, estaba fotografiando unos monos, estilo Macacos, no se bien su nombre, tendrían unos 60 centímetros de altura, más o menos, y de repente uno de ellos echo a correr por un tronco caído al ras del suelo hacia mi. Los monos son muy peligrosos, tienen dientes muy grandes y mucha fuerza. Cuando le vi correr hacia mi me asuste bastante pero lejos de salir corriendo, que hubiese sido lo peor, mi instinto me hizo tranquilizarme, abrir los brazos y abalanzarme hacia él gritándole. Todo fue en dos o tres segundo, pero dio resultado, el mono se quedo paralizado mirándome. Hice esto por que me acorde de que a un perro le podías asustar, bien abriendo un paraguas o levantando los brazos y gritando. No se lo esperan. Y eso creo que fue lo que paso. Tuve suerte, pero es la experiencia la que me hizo reaccionar así, el haber estado en situaciones muy difíciles muchas veces. Y es a lo que me refiero en este párrafo. Nunca sabemos como vamos a reaccionar y solemos hacerlo de manera que nos sorprendemos mucho a nosotros mismos.
Debemos de tener cuidado a quien nos juntamos, con que grupo vamos, en que religión o secta nos metemos. En la India hay miles de sitios raros y diferentes, cientos de religiones, sectas, grupos, y sobre todo de líderes carismáticos que tienen palabras estupendas para nosotros. Tened la cabeza fría para entrar en cualquiera de estos grupos y ver si os conviene y si su filosofía va con vosotros.
El miedo va a ser nuestro aliado. Le dije una vez a un chico que me acompaño en uno de mis viajes por la India: “que si tenía muchos huevos que se quedara en España”. Con esto di a entender que la valentía incontrolada o compulsiva se paga muy cara en muchos países, sobre todo en Latino América, que para mi es uno de los continentes peores para viajar o más peligrosos. Son los que menos escrúpulos tienen para robarte, secuestrarte o matarte. El siguiente en inseguridad es África, que en muchos países de este continente es todo un polvorín de un día para otro, aunque ahora esta muy tranquilo. Por lo demás el resto es más o menos seguro, hay de todo.
Hay que tener cuidado con ciertos turistas que nos encontraremos por el camino. Para mi, el más peligroso es el que tiene un perfil joven o a veces no tan joven, mochilero y bastante colgado. Ese turista algunas veces no es de fiar, debido a que su desorganización, falta de dinero y recursos, le hace a veces desesperado y en busca de una victima. No nos va a agredir físicamente, no lo creo, pero si se intentará aprovechar de nosotros y del dinero que llevemos. En este tipo de viajes de aventura es muy fácil encontrar a este personaje, pero no el la selva, desierto o en algún pueblecito perdido, estará en las ciudades, en la zona en la que se muevan los guiris.
Tenéis que saber que los robos en estos países en donde los timos, los cambiazos, las falsificaciones son el día a día, son muy poco frecuentes, me refiero a los robos a mano armada o atracos, salvo en algunas capitales de Sudamérica, como Lima, Caracas y Bogota. En África o en los países Asiáticos, entendiendo por Asia continental a Iran, Arabia Saudita, Turquía, India y China, Japón, y demás, los robos son muy raros en el día a día. Al turista le respetan, entre otras cosas por que las consecuencias son muy graves para el ladrón en el caso de que nos robara, y no os digo nada si ese robo es a mano armada. En Kenia me contaba un guía, que estaba impresionado por que en España, si alguien mataba a otro, salía en unos años por buen comportamiento de la cárcel y si robaba, casi ni entraba. Me decía que en su país, el robo a un turista se pagaba con la cadena perpetua y si el robo fuera a mano armada, como había pasado meses atrás, les fusilaban tras un juicio rápido. También me contaron esto en Iran. Un país en donde por desgracia esta en 2º lugar de ejecuciones por año, aunque no salga en la tele como las ejecuciones americanas. Allí si robas, te encarcelan o te cortan las manos y si matas ni te cuento. Estos son unos bestias.
Debemos de tener cuidado en las ciudades grandes. Allí se concentra mayor población, mayor paro, más necesidad a falta de pan y mayor delincuencia. Un buen consejo es, salvo que haya cosas que ver importantes, siempre ir en excursión o visita organizada, no estar callejeando mucho en estas ciudades grandes, es más fácil ser carne de cañón aquí para robos, hurtos u otras cosas, pero también es cierto que hay ciudades que hay que estar varios días para verlas y disfrutarlas. Ciudades como Hanoi, que estuve hace dos años, todavía hoy se puede andar muy seguro por sus calles, pero me comentaba un amigo hace poco que en la capital de Vietnam, en Ho Chi Min, la seguridad empieza a faltar por las calles de esa ciudad tan poblada, de por si, ya están acotados para el turista muchos barrios o sectores de la gran urbe. A medida que pasa el tiempo y la gente se acostumbra a los turistas y sus abusos, por que a veces somos tremendos, se va perdiendo el respeto al mismo y eso es malo para todos nosotros.
Otro robo es el robo en cuadrilla, que puede ser de diferentes formas. Una de ellas es cuando de repente te viene una prole de niños a pedirte lo que sea, limosna, comida, etc. Te tocan tantos niños a la vez que no te das cuenta que te están limpiando ¡que suerte!. Quiero pensar que hemos sido cautos, que habéis seguido estos consejos y que no llevabais nada en los bolsillos, por que si no a estos niños tan simpáticos tenéis que agradecerles que ahora tengáis menos peso encima. El punto positivo sería que al menos comerán unos pocos gracias a vosotros. Esto se suele dar en Marruecos, países musulmanes, en la India, en Tailandia y alguno más.
Otro tipo de robo en cuadrilla, es cuando en un paso de cebra o lugar muy concurrido, entre varios te rodean, como si estuvierais entrando en un concierto. En ese roce disimulado te han abierto la mochila, si la llevas en la espalda y te han robado. Esto lo vi en Cartagena de Indias cuando paseando con un amigo me di cuenta que en un paso de cebra, en donde había mucha gente, algo me llamo la atención, como que estaba pasando algo. Una cuadrilla de chicos de unos 30 años rodearon a mi amigo, como quien no quiere la cosa y entre la confusión de la gente y lo bonito que era todo, le habían abierto la mochila. Cuando yo llegue para agarrarle y sacarle de ese grupo de gente, justo tenían la cartera con los billetes a la vista. Hubo suerte esa vez, llevaba mucho dinero encima, otro error.
Otro robo es cuando te manchan y te intentan limpiar, y a veces lo consiguen de verdad, pero la cartera. Otras veces y esta es muy utilizada, es que en los mercados africanos, zocos o en otros lugares tremendamente concurridos, entre los golpes y roces nos han cortado con una cuchilla, cuter o bisturí la mochila, la cartera o el bolso y nos han robado.
Otro robo o mejor dicho hurto, es cuando comiendo, cenando o simplemente tomando algo al aire libre, dejamos la mochila en una silla junto a nosotros o peor aún, a un lado o en frente. En esos momentos veremos a una persona haciendo “futin”, pero en esprin, y casualmente veremos como sus manos se enganchara a nuestra mochila o bolso y siguen con su esprin, pero esta vez más rápido, y encima se pierde entre las calles. Nos ha robado y esta vez por despistados. Otro fallo.
PARA EVITAR ROBOS O SUSTOS, DEBEMOS DE HACER VARIAS COSAS IMPRESCINDIBLES.
¯ Ser prevenidos y la mochila de mano en un mercado o zoco la pondremos por delante de nosotros.
¯ Llevaremos poco dinero, esto lo he repetido ya, pero no me importa decirlo otra vez, hay cajeros por todo el mundo y podemos pagar con tarjetas de crédito. Llevad poco dinero encima. Para eso también están los cinturones falsos, que ya os lo he comentado en el apartado de dinero.
¯ Cuando nos sentemos en una terraza, todas las mochilas de mano tenéis para atarlas, con un clip o algo, a la silla, o pillad la mochila entre vuestros pies, o metéis una pierna por el asa o un asa metida en una pata de la mesa. No es ninguna bobada, no nos cuesta nada hacer esto y estaremos previniendo.
¯ Si la mochila de mano tiene varias cremalleras y en algún compartimiento tenéis algo de valor, otro error salvo que sea imprescindible, es aconsejable poner un candado o algo que no facilite la apertura.
¯ No llevar nada en los bolsillos de valor, salvo que tenga botones. El velcro no sirven, te lo abren entre roce y roce.
¯ Cuando vallamos a pagar en metálico no enseñemos toda la cartera o el bolso al vendedor, sed discretos, que no os vea lo que lleváis. Siempre hay gente mirando más hábiles que nosotros y en cuanto nos descuidemos, ya sabéis.
¯ Si llevamos bolso debemos de llevarlo pegado a la pared, no dejaremos sitio al ladrón para darnos un tirón y nos es igual llevarlo en un lado u otro.
¯ La documentación si no la podemos dejar en el hotel la guardaremos en una riñonera plana en la cintura, pero por dentro de la ropa o del pantalón, yo la llevo así, o colgada del cuello, pero por dentro de la camisa o camiseta. La documentación que llevaremos encima solo ha de ser lo más valioso, que es el pasaporte, los billetes de avión, las tarjetas de crédito, algo de dinero y otras cosas que creáis importantes y que no abulten. Nunca nos separamos de la documentación, ni la guardamos en la mochila o bolso. Si nos roban, que no sea esto.
¯ Dejaremos la documentación original más importante en la caja fuerte del hotel, pasaporte, billetes de avión, y lo que creamos oportuno de valor y saldremos con fotocopia de lo que hemos dejado, pero luego al facturar en el hotel que no se os olvide en la caja fuerte de la habitación.
¯ Es bueno tener fotocopiado todo lo más importante, desde el pasaporte hasta las tarjetas de crédito, los billetes de avión, contrato de seguro de viaje, direcciones, etc.
¯ Un truco muy bueno, aprovechando las nuevas tecnologías actuales, es colgar en tu correo electrónico toda tu documentación. Lo escaneas o que te lo hagan, y adjuntas a un archivo, tu pasaporte, direcciones de interés de amigos, familiares, embajadas, teléfono de asistencia en viaje, billetes de avión escaneados y con los números bien claros, etc. No sabéis lo bien que viene. ¿Qué os han robado la documentación?, no hay problema, solo tenéis que ir a cualquier oficina de Internet que hay en todo el mundo y en cualquier pueblo, por pequeño que sea, e imprimirlo y al menos tenéis algo para empezar a tramitar de nuevo todo. Por este medio, el de Internet, es un medio fiable, que no se pierde nada, salvo que lo estropeéis o borréis vosotros.
¯ No seas ostentoso. Si tienes es un reloj nuevo, que te encanta y quieres enseñarlo, espera a tu vuelta de viaje, o te durara poco, a parte de que te pueden dar un susto a ti o a tus acompañantes por un posible robo o atraco. Lo mismo con las joyas, cuanto más discretas valláis mejor.
¯ Con la ropa sed igual de discretos, o estaréis diciendo a los que tienen pocas ideas, y las pocas que tienen, las tienen malas, que vosotros tenéis dinero.
¯ En el taxi, ya lo he dicho en otro capítulo, cuando entremos, no soltamos las bolsas o la cartera o mochila de mano, por si se nos olvida. Es muy frecuente dejar a un lado lo que llevemos y luego al pagar, en unos segundo se ha ido el taxista, no intencionadamente, y nos hemos dejado todo o parte.
En muchos países desarrollados y con Embajada Española no es problema si nos roban la documentación importante, a parte del tiempo que nos hagan perder no pasa más, pero en otros países no es tan fácil. Podemos perder aviones o al grupo con el que vamos de viaje, por este inconveniente tan frecuente.
Las embajadas son muy útiles para cualquier español. Ellos te tramitaran el pasaporte otra vez, te darán asistencia jurídica si la necesitaras, te repatrían en caso de muerte, si quieres comprar allí algo importante, terrenos, casas, o lo que sea, ellos te asesoran y te orientan. Incluso te pueden dejar dinero, que a tu vuelta tienes que devolver, y muchas más cosas. Si no hubiera embajada Española y hubiera otras de la Comunidad Europea, podemos acudir a esas en caso de urgencia.
A veces no es por un robo, es por el extravío de la mochila, la maleta o por que se nos olvido en la cafetería. ¡Para mataros! Nunca perderemos de vista nuestro equipaje, ni en el taxi, ni en el banco del museo que acabas de visitar, ni en ningún lado.
En los hoteles es difícil que nos roben por no decir casi imposible. Cuanto mejor es el hotel más difícil es esta circunstancia. Muchas veces creemos que son robos y en realidad son pérdidas o despistes nuestros. Montaremos el número en el hotel y sospecharan de una señora de la limpieza, que es muy buena gente, y que como mucho, de vez en cuando, se echa un poco de crema o potingue de la señora de la habitación. En Camboya, en Siem Reap, en un hotel de tres estrellas. Cuando subía a mi habitación después de desayunar, había un señor dando parte en recepción, o mejor dicho, montando un escándalo por el robo de un dinero que tenía en la mesita de su habitación y que al volver del desayuno ya no estaba. Casualmente las señoras de la limpieza estaban en mi planta, también la del señor, vecino de habitación, cuando desayunábamos. Hay quedo la cosa. Por la noche me encontré al conserje y le pregunte por el escándalo de esa mañana y me dijo que el señor había encontrado su dinero y que no se lo habían robado, que lo había metido en un sobre suyo. Me imagino que pediría disculpas a todo el mundo.
Es más probable el robo en las Guest House o pensiones por África, Asia o Latino América, pero aún así sucede muy pocas veces. Pero si sucede, no será del personal de esa pensión. La gente empleada no es tan tonta, como para robar a un turista y que se le caiga el pelo, y además son muy buena gente, que se ganan la vida de esa forma tan honrada. Es más probable el robo por otros turistas u oportunistas de la zona. Los cerrojos son muy malos y las puertas se abren con toda facilidad. Debemos de prevenir y no dejar nada a la vista en este tipo de hoteles baratos. Debemos de cerrar las mochilas o maletas con nuestros candados, es mejor prevenir que lamentar. Llevad con vosotros una bolsita de cinchas o bridas de plástico, y cuando creáis oportuno unid dos cremalleras con la brida o lo que queraís, es imposible de abrir salvo que se corte esta. Son muy útiles, sobre todo en los viajes.
No es la primera vez, que he tenido que dormir en estas pensiones arrimando la cama a la puerta, debido a que esta se abría con toda facilidad. Otras veces, como en Monte Cristi, al norte de la República Dominicana, frontera con Haití, en una pensión tuve que meter una navaja entre los pestillos de la puerta por que habían desaparecido y no tenia ningún tipo de cerrojo. En Birmania, en Mandalay, tuve una experiencia más fuerte. Estaba solo en este viaje y al llegar a esta ciudad me busque un sitio para dormir. Le dije a un taxista que me llevara a hotel barato y este me llevo al de sus amigos, lo normal. Pregunté el precio y me enseño mi habitación, por que así se lo pedí al dueño del hotelito. Esta, estaba al final de un largo pasillo, cosa que me extrañó, pero tenia mucha luz, estaba pintada de color vede, tenía una cama grande de dos por dos, lo normal en ese país, y aire acondicionado. Me fui a dar un paseo, ya que era temprano y al volver por la tarde e ir a mi habitación, me encuentro el largo pasillo muy concurrido. Estaba lleno de chicas birmanas, un poco ligeras de ropa, pero no le di importancia. Ya me dio mala espina, cuando en mi habitación, sobre las 19 horas, cuando me preparaba para ir a cenar, llaman a la puerta y me encuentro a una de las chicas que me decía que si me hacía algún favor, ya me entendéis, la dije que no lógicamente, las mujeres me gustan mucho, pero a estas las tengo mucho miedo y respeto, en otro capítulo os explico por que. Por la noche empezaron a intentar entrar en mi habitación y de vez en cuando las oía como se acercaban y me movían el pomo. Como encima la cerradura era malísima y sin cerrojo, pues con la tensión que tenía en esas circunstancias, tuve que arrimar la cama a la puerta y aguantar, hasta que se cansaron de intentar abrirla y de llamar para charlar conmigo, entre otras cosas. Al día siguiente cogí mi mochila y me fui a otra parte más segura y un poco mejor.
Muchas veces el coste de una estrella a dos o tres, es muy pequeña, sobre todo si lo traducimos a euros, y desde luego lo ganas en seguridad, que es lo más importante.
Toca hablar de la seguridad para las cámaras de fotos y los equipos electrónicos que podamos llevar, discman, walkman, mp3, cámaras réflex y digitales, cámara de video, tele objetivos, anteojos, etc. Todo esto tiene una salida tremenda en el mercado negro, por lo que es objetivo principal de los simpáticos de la calle, es decir de los ladrones. Si vamos mostrando a todo el mundo que llevamos una Nikon Reflex Digital D70 , por ejemplo, una cámara que vale 1200 € con objetivo, y la llevamos en el cuello bien a la vista, lo que conseguiremos es que a alguien le interese también las fotos que estáis haciendo y quiera coger la cámara para verlas, pero en su casa. Pasa lo mismo con el resto del equipo, solo tenemos que ser discretos. Yo llevo una cámara buena, llamativa para cualquier ladrón, una cámara reflex digital y unos objetivos de diferente lentes de aumento. ¿Cómo las llevo? No llevo nunca un estuche de los convencionales de fotógrafo. Llevo una cartera, tipo colegio, con asa que se cuelga por el hombro, con diferentes cremalleras y clips de seguridad, es nueva. Esta cartera es genial, guardo los objetivos con sus estuches o si estos ocupan mucho, quito los estuches y los meto en calcetines de montaña. Llevo una cámara de video pequeña metida en un trapo azul y la cámara de fotos en otro trato verde de algodón y todo bien colocado dentro de la cartera. Así llevo muchos años. Paso desapercibido a ojos de la gente. Cuando saco la cámara de video o de fotos, la saco con el trapo que no guardo posteriormente. Saco la foto o gravo y la vuelvo a meter en su cartera o en el trapo, depende si la voy a seguir usando. Todo esto lo hago cuando el pueblo o ciudad donde me encuentro no me da mucha garantía. No quiero dar oídos a sordos, pero al final me he acostumbrado y lo hago ya en todos los sitios a donde voy en el extranjero. No me cuesta nada, si no voy a sacar fotos o voy a estar un trayecto corto sin hacerlas, guardarla en su trapo y llevarla en la mano atada a mi muñeca, por si tengo que sacar alguna foto rápida, o bien la guardo en la cartera. En el aeropuerto es mi equipaje de mano, junto con mi mochila de mano, lo que no facturo y siempre, mi cartera de colegio, pasara desapercibida frente a curiosos. Por supuesto, que casi se me olvida decíroslo, nunca la pierdo de vista, ni se la dejo a nadie, ni la dejo en el maletero del taxista, ni en una silla, si no en mis pies, ni la facturo en el aeropuerto, no me separo de ella, por que hay gente que me abra visto meter y sacar cámaras de ella. Solo prevengo, para mi es una rutina y sobre todo por que perder eso me costaría un disgusto, por perder las fotos el viaje y su video y por el dinero que perdería.
Cuidado con los monos. No os creáis que estoy loco. Los monos en la India son muy peligrosos y uno de los mayores ladrones que hay. Detrás de este animal tan simpático, hay un cómplice que suele ser un tendero de fruta u otra persona que ha enseñado al mono, que es listísimo, a que si le trae ropa, bolsos, cámaras y más cosas, obtendrá comida fácil. De por si, en muchos sitios puedes ver señales de advertencia o avisos en las guías para el turista de que ¡Cuidado con los monos!. Esto no solo se da en la India si no en más países en donde el mono convive en las ciudades con las personas.
Uno de los peligros de viajar solo es que en muchos lugares, pueblos apartados, ciudades en donde se penaliza brutalmente al ladrón, es más rentable para el delincuente, matarte y luego robarte, que atracarte y que le identifiques. Es por ello por lo que muchas veces me toca decir que voy a tal sitio por que me esperan unos amigos. O por lo que nunca quedo con un taxista que no conozca, que me haya encontrado en la calle, para desplazarme de noche o de madrugada. Si le necesito para ir a algún sitio a esas horas, al aeropuerto por ejemplo que suele estar lejos de las ciudades, que lo llame el hotel, por que un desconocido me puede hacer una encerrona, es difícil, pero ha pasado y yo solo pienso en mi seguridad.
No os olvidéis que al final somos nosotros, los turistas, los que perdemos, ante la falta de seguridad por nuestra parte. Si nos roban el equipo de video o de fotos, nos roban nuestro viaje. Nuestros recuerdos y alegrías, y aunque les llevemos en la cabeza, no es lo mismo.
Si te roban, denúncialo. Te servirá por si encuentran lo que te han robado. Deja tu dirección de hotel, te la pedirán de todas formas, y guarda la denuncia y las facturas de lo que tengas que comprar, para demostrar al seguro que te han robado y para que luego la compañía te indemnice por ello, todo esto si tienes seguro, que te lo aconsejo, vale muy poco dinero y te ayudará bastante.
UN SEGURO DE VIAJE, lo que te cubre, a parte del robo, que siempre es una cantidad pequeña, el metálico y equipos electrónicos, para evitar la picaresca, están excluidos de las coberturas. Cubre las repatriaciones por enfermedad o accidentes, la vuelta urgente a tu ciudad, el envío de un familiar a donde estés y los gastos de hotel para él, la asistencia médica, la asistencia jurídica y más cosas muy interesantes y suficientemente importantes, que por unos euros, entre 30 € a 180 €, depende del destino y el tiempo, nos pueda dar una cobertura y mucha tranquilidad. Además siempre te dan un teléfono de urgencia para llamar desde donde estés.
4º.- PERSONAJES EN LOS VIAJES
Para un viajero como yo los personajes o las personas son lo que me mueve a viajar, es decir, mi turismo es para conocer a las distintas personas y personajes que pueblan esos países de Dios. Me parece lo más interesante y motivador el conocer otras personas, culturas, etnias, pueblos, tribus y países solo por ver sus costumbres, hábitos sociales, políticas y personajes pintorescos de cada país. Lo de pintoresco me refiero para los ojos de un turista extranjero como yo, cuando voy a esos lugares, y lo digo con todo el respeto. Puedo llamar personaje curioso o pintoresco a un Jainita de la India o un Chaman o curandero de una tribu. Es una forma cariñosa de nombrarles. Y de estos y otros os voy a hablar en este punto, pero más tirando a los cuidados y consejos cuando nos encontremos a ciertas personas.
Quiero hablaros de los taxistas, guías, oportunistas, personas de aeropuertos, profesionales del timo y contaros diferentes historias que os sirvan de aprendizaje, por que son reales.
La gran mayoría de los taxistas en todo el mundo se ganan a base de horas y esfuerzo su dinero. Son grandes profesionales que tienen que estar horas y horas al volante, pero hay un pequeño porcentaje de estos señores que dan mala fama a este sector y que para los turistas son altamente peligrosos. Los timos y artimañas que utilizan estos malos taxistas son muchos, pero los más comunes en todo el mundo son, el cobrarnos de más por el trayecto que le hemos solicitado, darnos más vuelta o coger una dirección con su coche de más recorrido o si no conocemos la ciudad, llevarnos directamente al atasco, todo para cobrarnos más. Esto sería lo suave y como en España o en Europa no se regatea, ni se cierra el precio, salvo trayecto muy largo, pues nos lo tenemos que comer. Pero el problema para nosotros es cuando nos encontramos un taxista en la India, Asia, latino América, África, en el que nos vemos abocados al regateo por que no funciona el taxímetro o no quieren encenderlo para nosotros, así nos cobran más.
Lo más habitual que nos puedan hacer es engañarnos con el precio si no regateamos o no cerramos correctamente el precio. Si es así, y ya lo he dicho en otro punto, tendremos problemas en lugares en el que nosotros tenemos poca seguridad. Son auténticos depredadores y psicólogos a la hora de captar su presa. Son excelentes regateadores y algunos muy peligrosos. En todos mis viajes siempre topo con alguno así, no falla, quieren hacer el mes a mi costa o a la costa de otro turista. Este año mismo, negocié un precio dentro de la ciudad de Kuala Lumpur para que me llevara a un trayecto, pero antes me llevó a ver a un amigo suyo, que no era tal, si no que pregunto, ya que yo se lo pedí, que quien me podía llevar a Kota Bharu, a 600 kilómetros de allí. Cuando, después de regatear con otro taxista para que me llevara al día siguiente y luego negociara él su comisión por llevarme allí, me llevo al destino que le dije en un principio y me quiso cobrar más del triple. Lógicamente tuve unas palabras con él, pero ya me saco el doble. Lo peor es que se ponen violentos, te pueden vocear, salir del coche gesticulando y eso asusta bastante y lo saben, más cuando vas solo. Lo mejor cuando te pase esto es llamar a la policía cercana, muchos de estos sinvergüenzas saldrán pitando.
También existe lo contrario, muy buena gente, que te darán más de lo que tu les pidas. Estos son los mejores guías y si te portas bien con ellos te recompensaran llevándote a sitios que nunca verías en un viaje organizado. Es ideal este trasporte, a parte de barato, para conocer una cuidad o para que te lleven a otros lugares cercanos. Si vas con más gente, menos de cuatro personas, te lo aconsejo e incluso solo.
Me acuerdo en Monte Cristi, al norte de la República Dominicana, frontera con Haití, que cuando llegue allí en autobús, me aloje en un hotelito muy cutre en el que el dueño era el Alcalde y taxista, a parte del más rico del pueblo. El hombre muy agradable, cuando le dije de mis intenciones de pasar a Haití se ofreció a llevarme a la frontera a unos kilómetros de este pueblo. Ese mismo día, por la tarde, me llevo a dar una vuelta con su coche, a presentarme socialmente a su gente cercana. Lo gracioso fue que primero me llevo a conocer a su amante, una chica joven y guapa, la cual pensé que era su esposa, pese a la diferencia de edad, por la forma de entrar en su casa y de tratarla. Esta vivía en el centro del pueblo, pero me equivoque cuando a continuación me llevo a una escuela de monjas y me presento a otra mujer, que trabajaba de profesora en ese centro. Esta tenía cara de buena persona, con más edad y me dijo que era su esposa y que la quería mucho, que era muy buena. Lógicamente yo alucinaba, pero parece ser que es un poco la cultura de allí. Luego, este amable taxista me llevo a su casa, me presento a toda su familia, me invito a una cerveza, pero antes de llegar sucedió lo mejor. Dando una vuelta por el pueblo, una señora nos asalta en un paso de cebra y le pregunta al taxista, que donde esta su marido, que no esta en casa y que sospecha que esta en la casa de otra mujer. ¡Madre mía! Esa mujer quería matarlo, ya que este señor era su marido y sospechaba, correctamente, que estaba en casa de otra mujer. Este señor era inválido, como me dijo mi amigo taxista, iba en silla de ruedas, pero era el letrado del pueblo y el más rico y un partido así, allí no se deja pisar por otra mujer. Tuvimos una especie de carrera por las calles del pueblo, de unos 10.000 habitantes. Íbamos de casa en casa, preguntando si este estaba allí, pero este personaje, según este amigo nuevo, tenía más de una amante. Al final no le localizamos pero me imagino que cuando le pillara su esposa muy rápido no iba a salir de casa para librarse de unos buenos palos. Al día siguiente me llevo hasta la frontera de Haití y logre cruzarla por que él mismo soborno a un soldado de Haití. La historia sigue, pero esa es para otro capitulo.
Los guías. Estos son muy recomendables si queréis ver en profundidad una cuidad, pueblo, centro histórico o conjunto de monumentos. Es raro encontrar una persona con pocos conocimientos de la materia que se hable, suelen ser muy profesionales en ese sentido. Si vais a viajar en grupo, varias personas os lo recomiendo. El precio, dependiendo del país es más o menos caro, pero entre unos pocos compensa su servicio, si lo que queremos es profundizar sobre un tema. Por todo el mundo hay guías para todos los idiomas, incluido el Español, solo tenéis que solicitarlo en el Hotel o en la oficina de turismo. Muchas veces la crítica hacia este sector viene por su afán por vender o llevarse comisión de las tiendas a las que lleva al turista. Este problema de búsqueda comisiones extras se dan siempre en los guías de agencias de viajes. En este sentido son personas egoístas, aunque les entiendo por que se tienen que ganar la vida, pero esto les hace malos consejeros a la hora de preguntarles por donde tenéis que ir, que tengan una buena calidad precio, a comprar algo que queréis. Siempre os intentará acompañar a la tienda donde el se lleva comisión, aunque no le veáis entrar, él cuando os deje ira a por su comisión. Esto también encarecerá vuestra compra. He conocido pocos guías que no quisieran llevarme a alguna tienda para comprar. Uno de estos le conocí en Varanasi, India. Quería conocer el Ganjes profundamente y contraté un guía en el hotel. Este señor de unos 60 años fue muy profesional y me dijo que él no me iba a llevar a comprar nada, yo no le creí por que todos te dicen lo mismo, pero así fue.
Los oportunistas de calle. ¿Que decir de estos personajes? Nos les encontraremos por todos lados, algunos con malas intenciones, casi todos. Son personas que se ganan la vida, de forma ilegal, con el turista. Estos hacen de guías, aunque no lo sean oficialmente, te acompañan para buscar algo en concreto, aunque acabaras en su tienda o la del que le paga, auque no quieras ese producto. Cuidado con estos personajes. Una vez más he de advertiros que siempre hay buena gente en estos personajes, pero unos pocos, hacen que nos pongamos en guardia cuando les veamos. Me acuerdo de un personaje muy agradable y buena persona en Fez, Marruecos, que se ofreció para hacernos de guía dentro del laberinto de la parte antigua de esta ciudad, una maravilla, por cierto. Este señor no era guía oficial, se llamaba Mojamez, y nos ofreció sus servicios de guía, a las puertas de la ciudadela, con mucho cuidado por si le veían los policías. Mojamez a penas tenia dientes de las palizas que le habían dado en la cárcel, esto cuando estaba el régimen dictatorial del anterior Rey de Marruecos. Aceptamos sus servicios, un amigo y yo, por que nos cayó bien. El nos dijo que no podía ir junto a nosotros, por que si le verían los policías u otros guías le denunciarían y que el iría un poco más adelantado, solo unos pasos y nosotros le seguiríamos. Eso hicimos, nos enseño malamente la parte antigua de Fez y rápidamente nos llevo a la tienda en donde el se llevaba su comisión. ¿Cómo nos tomamos esta historia? Pues nosotros pensamos que ayudábamos a una persona y no nos importo que no nos enseñara perfectamente la ciudadela. Pero esto es normal en muchos países.
Luego esta el oportunista pesado, que le dices que te lleve a tal sitio y te lleva al que quiere él y a su tienda. Aparece el personaje que le dices mil veces, -por favor no quiero ir a ninguna tienda- y en cuanto te descuidas ya estas en otra. Y te enfadas y ellos ya te ponen mala cara y les tienes que terminar diciendo que se vallan a paseo. Pero estos engaños son lo normal en muchísimos países. Si tienes experiencia, personalidad o carácter, te les quitaras del medio, pero por desgracia la gente es temerosa y no se atreve a darles la cara. Les hay que se enfadan si no les compras nada en las tiendas a las que te llevan. No debes dejar que te coman la partida, siempre con educación y sin gritos, esto es importantes, por que hay países que los gritos se interpretan de muy mala forma, despacharemos a nuestro acompañante oportunista. No debemos nunca perder la compostura. Si vemos que se pone pesado o violento, esto es difícil, buscaremos un policía o simplemente entraremos en una tienda y le diremos al dueño que llame a la policía, aunque solo con decir a un personaje de estos que vas a llamar a la poli, se irán rápido.
Uno de los primeros personajes a tener en cuenta, para no bajar la guardia, que nos encontraremos, será en el aeropuerto o estaciones de tren, sobre todo en el primero. Cuando lleguemos en un viaje fuera de grupo, por nuestra cuenta, estaremos, posiblemente, si es la primera vez que vamos a ese país, como pez fuera del agua. Puede que lleguemos a ese aeropuerto a horas muy malas, de madrugada o de día, es igual, en el momento en el que salgamos a la calle o simplemente fuera de la parte privada del turista y entremos en la parte pública del aeropuerto, habrá muchísima gente que nos haya puesto los ojos encima. Nos entraran, se ofrecerán y depende de lo que queramos, nos marcharemos o nos pondremos a regatear un destino en concreto. Estos suelen ser casi todos taxistas ilegales, van con su coche. Lo mejor para combatir, el que será casi seguro nuestro primer timo, si es la primera vez que vamos a esa ciudad, es llevar el hotel concertado, o decirle que queréis ir a un hotel de la guía y se lo enseñáis, o si sabéis el idioma se lo decís. Os preguntara si tenéis reserva, decid que si. Si le decís que no, el os dirá que conoce un hotel mejor y más barato. Os llevara a saber donde. El precio será, casi seguro, un poco más caro que el resto. Ellos saben con dos palabras que le digas si has estado y conoces los precios de esa ciudad. Estas perdido, pero asume, como lo asumimos todos, salvo que alguien te haya informado de los precios días antes de llegar, que ese trayecto será tu primer contacto con la realidad de tu viaje.
Hay otros personajes peores en los aeropuertos. Son los timadores, los sin vergüenza y ladrones. Intentaran robarte el equipaje, aprovecharse de ti y depende de lo listo o lo torpe que estés, correrás más o menos peligro. Cuidado con esta gente. No te dejes llevar por ellos, por la pena que te den o por lo enrollado que puedan ser contigo. Son personas con hambre, con mucha necesidad y siento decirte que eso les hace muy peligrosos. Tú tienes más que ellos solo en tu maleta o mochila, y ellos lo saben. Saben que en el mercado pueden vender muy bien lo que a ti te roben, y robos hay siempre. De lo robos hablaremos en otro punto.
También os digo que si en el primer trayecto del aeropuerto al hotel, os gusta el taxista o conductor que os esta llevando, por que os da confianza y le veis buena gente, proponedle lo que queréis hacer en vuestro viaje, si no lleváis nada organizado. Es mejor cerrar un trato con la persona que os guste y os de confianza, que poneros a buscar. En estos viajes yo creo mucho en el destino. A mi personalmente me gusta y siempre me he dejado llevar por la persona de mediana edad, tirando a los 50 años. Suele ser padre de familia, muy asentado y pasado de vueltas, sin ganas, el 99% de ellos, de meterse en líos. Para mi, este perfil a sido genial siempre. Me han dado más de lo que yo pedía y por supuesto, cuando esto ocurre, yo tengo que dar más de lo que le dije y no dinero siempre. Puedo dar le regalos, ropa o muchas cosas. Sed generosos o “el viaje”, el destino, os castigara por abusar del que tiene menos que vosotros.
Lo que te puedes encontrar por hay es la gente que utiliza la pena y su desgracia para venderos cosas o llevaros consigo o sacaros algo. Solo os digo que tengáis mucho cuidado, que no os fiéis ni os dejéis llevar por la pena o desgracia de esa persona o a lo mejor las consecuencias serán peores. No digo que no ayudéis si creéis necesario, pero muchas veces no es bueno, podéis complicaros la vida y si dais a un niño es mejor darle a escondidas que públicamente. En la India o África si damos a un crío nos pueden rodear otros muchos y en ese rodeo robarnos. Yo dejé de dar caramelos y globos a niños públicamente, hace unos años, por que se mataban entre ellos. Al final, salvo en tribus pequeñas, de pocos críos, se lo daba a un sacerdote, monje, gurú, profesor, o jefe para que lo repartiera. Una vez, hace unos 10 años en Gambia, vino un crío de unos 6 años, con la ropa rota, precioso y muy simpático, a pedirme limosna. Yo siempre llevo en mi mochila ropa para regalar y saque de mi mochila una camiseta para el crío. Al dársela y a los pocos segundos, una piedra de unos 5 centímetros le impacto en la espalda al niño. Había metido la pata hasta el cuello, ya que los demás crios también querían ropa o lo que fuera y así lo demostraban. Tuve que cogerme al niño y montarle en el bus conmigo hasta alejarle e esos bestias amigos suyos. Me di cuenta que tenia que seleccionar mejor la entrega de lo que llevaba.
Me encontré a un español en la India tirado en las calles de Pushka. El, al verme, me debió de identificar como español y me llamo. Al ver que reaccionaba le confirme mi nacionalidad y me acerque hablar con esta persona, que rápidamente me contó media vida suya. Entre otras cosas me dijo que era de Sevilla, de unos cuarenta años, que había estado en la Legión Española y en las milicias Colombianas y que había matado a mucha gente, me decía todo esto mientras me enseñaba todos los tatuajes que identificaban a estos grupos militares. Ya empezábamos mal. Me contó que se estaba muriendo y que tenía cólera. Que hacía años que no veía a su familia, mujer e hijos, y que quería conseguir dinero para volver a España. Cierto o no, con los antecedentes que tenía esta persona te obliga a ponerte en alerta. Esto es una supervivencia y muchas de las cosas que me decía mi instinto las interpretaba como falsas. La conclusión, y yo nunca bajo la guardia en estos viajes, es que me fui y le deje hay. No me cuadraban muchas de las cosas que me decía y tenía la sensación de que nada de eso existía, de que solo quería sacarme dinero.
Algunas veces los personajes más peligrosos son los propios extranjeros. Algunos son muy hábiles, vividores y experimentados viajeros. Te encuentras de todo, casi siempre gente muy interesante que viajan solos, en pareja o en grupos de tres o cuatro personas. Viajan por libre sin nada organizado. La gente se aloja en todo tipo de hoteles, albergues, guest house, pensiones, hoteles, etc. Para mi, el sitio más peligroso para encontrar al oportunista colgado es en las guest houese o albergues, que tanto hay en todo Asia e India o las pensiones de Latino América. Debemos de extremar las precauciones con la persona que se nos acerque en estos lugares. Gente agradable, que casi siempre lo único que quieren es charlar e intercambiar experiencias, quieren ligar, quieren información o simplemente compañía. Esto es lo normal, pero… hay otro tipo de turistas que van sin un duro a buscarse la vida y si pueden sangrarte o ir sacando unas pelas “con el sudor del den frente” mejor. Este año en Kuala Lumpur, callejeando por China Town, me viene un Ingles un poco bebido y me para. Me dice que ayer tenía una mochila y que la dejo en un pub, que es donde están siempre por la noche y donde estaban todas las prostitutas, y que la perdió. Que estaba tirado, todo esto en medio de la cera, y que si le daba algo de dinero para no se que, no le entendí, se le iba la lengua. Cuando le dije que no le entendía nada, que no hablaba Ingles, algo muy socorrido que utilizo mucho y que viene genial cuando quieres quitarte a alguien de encima, un comprador o como este personaje, el tipo me insulto con su lengua sucia y se largo. Si tienes que dejarte llevar o ayudar a toda la gente que te encuentras por el camino, de verdad, estáis perdidos.
Pero hay veces que si te involucras. Es el caso de la periodista alemana, en Camboya, que me pidió ayuda para cruzar el país en barca (de este transporte ya hablé antes) y que tenia miedo de llegar al puerto se Shien Reap, en donde la habían informado de lo violenta que se pone la gente, al llegar allí este transporte, para coger o captar a los turistas que van por libre. La verdad es que esta chica alemana tenía razones para tener miedo. En un país como este en el que la mujer no vale nada y no la respetan, una mujer sola extranjera tiene que extremar las precauciones, aunque lo normal es que no te pase nada, tienes que tener cuidado. Esta chica me contó que estaba escribiendo artículos para una revista Alemana (como otra mujer que conocí en Birmania) y que si la podía ayudar a cruzar el puerto ese y compartir el taxi hasta la ciudad. La dije que si, me dio muy buen rollo y no me suponía nada. Tras seis horas de viaje tremendo y yo con una insolación de caballo, llegamos al embarcadero y eso fue la guerra. Era increíble, la gente se mataba por cogerte la mochila, esto hace unos años, por llevarte a su hotel o pensión, por llevarte en su coche, por ser tu guía para ver las ruinas de Ankor, para todo. La dije a esta chica que se agarrara fuerte a mi brazo, que se sacara todo de los bolsillos y que la riñonera se la metiera por dentro de los pantalones y que por nada soltara su mochila, yo iba con mi mochila grande y la de mano. Tuve que empezar a salir a golpes de allí. La gente te agarraba, te gritaba, te insistían, abría más de cien personas, y no te dejaban pasar, así que me abrí paso con los brazos y empujando sin cortarte un pelo o de allí no salíamos. Yo peso unos 100 kilos y soy alto, eso me ayudo, si esta chica hubiera ido sola, otro la habría sacado, pero fijo que lo hubiera pasado mal. Al final, fuera de la multitud, compartimos taxi y nos fuimos a comer y nos despedimos, íbamos por caminos diferentes. Esta chica no estaba bien, devolvía todo y tenia diarrea. La di unas medicinas que llevaba y luego la reñí, por que me contó que la gente la increpaba y que los hombre la miraban mal. Esta mujer de unos 30 años, a parte de rubia, tenía mucho pecho y lejos de ir discreta llevaba una camiseta ajustada blanca, estaríamos a unos 40 grados. Yo estaba encantado de verla, pero la verdad es que así no se va a un país tan conservador como Camboya, por eso la reñí. Tenia que respetar su cultura, por su bien. Luego me dijo que si la acompañaba a fotografiar unos templos, fuera de ruta, a una hora en coche de Shien Reap y otro tanto andando. La volví a reñir. Camboya es un país lleno de minas y de mutilados por ellas y esta quería salirse de la ruta, en contra de todo los consejos que te avisan del peligro de las minas, para ir a fotografiar un templo, como si no tuvieras bastante con los templos de Ankor. Esta chica no tenía mucha cabeza pero estaba empeñada en ir, así que allí acabo nuestro encuentro. Cada uno que mire por su supervivencia, pero luego te enteras que ha habido un suceso a un turista o un accidentes y me gustaría saber quien ha sido más imprudente.
Os voy a contar algún truco para que no se os olvide nada cuando organizáis un viaje largo o de fin de semana. ¿Cuántas veces os ha pasado o habéis oído que algo se ha olvidado? Hay un método que utilizo desde hace años para ser más práctico y que no se me olvide nada y os puedo garantizar que es cierto: no se me olvida nada.
Yo utilizo dos formas para hacer la maleta o la mochila. Una, pensando mentalmente en mi cuerpo, empezando por los pies hasta la cabeza y nunca saltándome ninguna parte del cuerpo. Esto quiere decir, que en una cama o mesa, o directamente en la maleta o mochila, voy poniendo todo lo que necesito. Este método es muy rápido y eficaz a la hora de hacer una maleta rápidamente. Empiezo así:
CONSEJOS PARA QUE NO SE NOS OLVIDE NADA A LA HORA DE HACER UNA MALETA O MOCHILA.
Visualizo mentalmente mi cuerpo y veo lo que necesito en ese viaje. Empiezo por los pies, y pienso en lo que me va a hacer falta:
- Pies: Medias, calcetines de vestir, deportivos o de treking, chanclas baño o de treking (cojo lo que necesite), zapatos o zapatillas, etc.
Lo que pienso y necesito lo voy cogiendo, siempre con orden. Si digo chanclas, voy a por ellas y las coloco dentro de la maleta o mochila, o encima de donde esté poniendo todo. ESTO ES MUY IMPORTANTE, es mejor no pasarse nada y no decir la frase “luego lo cojo”. Al final se nos olvidará. Luego sigo con otras partes de mi cuerpo.
-Piernas: Pantalón largo, corto, traje de baño o pantalón deportivo, pijama, etc.
- Caderas: Calzoncillos, cinturones, etc.
- Extremidades superiores: Camisas de vestir. Polos, camisetas de manga corta, larga o de tirantes, camiseta de montaña o polares, chubasquero o ropa de abrigo, chaquetas, etc.
- Cabeza: Gorro, de sol, de baño, sombrero, gafas de sol o de ver, etc.
Muchas veces he tenido que hacer una maleta rápida de fin de semana y con este método no se me ha olvidado nada.
OTRA FORMA DE HACER UN AMALETA O MOCHILA ES HACER UNA LISTA.
Cuando llevas muchas cosas es aconsejable. Esta la confeccionas una vez y te sirve, variando alguna cosa dependiendo del destino, para todos los viajes. Esta lista que a continuación os muestro es una de tantas que he hecho y guardo en mi ordenador año tras año, viaje tras viaje, y que sólo he modificado en función del país de destino o de aventura.
El método que utilizo es el de la organización. Hago tres columnas, una donde pongo “VARIOS”, en donde escribo todo lo que necesito, que no sea ni ropa ni salud e higiene, otra columna con “ROPA” y otra con “HIGIENE Y SALUD”. Cada cosa la voy poniendo en su columna por escrito (esto durante días o semanas antes de mi viaje). La voy pasando a ordenador para no se me pierda y así tenerla para otros viajes. Una lista mía sería la siguiente, la del viaje a la selva de Borneo, por ejemplo.
1º.- VARIOS
Aquí voy metiendo diferentes tipos de cosas que voy a necesitar, como, linterna, video, Cargador, Baterías, Mando, Cámara Fotos, Cargador cámara, Baterías, Trípode, Cintas video, Tarjeta de cámara de fotos, Alicate-navaja, Gafas de sol, Gorra, Cartera monedero, Cinturón falso, Riñonera plana, Costurero, Guía de viaje, Diario de viajes, Libro lectura, Cinchas para atar la mochila, Discman + cascos + Funda, MP3, Pasaporte, Visas, DNI, Billetes de avión y tren, Euros, etc.
2.- VESTIMENTA
Zapatillas Treking, Botas treking, Chanclas baño, Calcetines deportivos, Traje de baño, Pantalón largo de dos piezas, Nikis, Calzoncillos, Camiseta azul, mosquitera de cara y cuerpo, Chubasquero, Toalla de mano pequeña, Medicinas para regalar, cosas para regalar…..
3.- HIGIENE – SALUD. Crema solar, Antimosquitos Relek, Tiritas, Mercromina, Gasas y Vendas, Tijeras, Cortauñas pequeño, Esparadrapo, Champú-gel, Cuchillas y espuma de afeitar, Aftershave, Muestras de Colonia, desodorante, Clinex…..Botiquín completo y personal.
Todo esto lo meto en una mochila de
¿COMO METER TODAS ESTAS COSAS EN LA MALETA O EN UNA MOCHILA?
En una maleta, como queráis, ya que al abrirla podéis coger y ver lo que necesitéis al momento. Lo único que la ropa que metáis no vaya muy suelta u os llegará totalmente arrugada. En una mochila es muy diferente, meteremos primero en la mochila lo que menos necesitemos durante el transporte: toallas, regalos, calzado, chubasqueros, mosquiteras, etc. Pensad que las mochilas grandes suelen tener una cremallera en la parte baja de la misma. Continuaremos poniendo las cosas delicadas junto a las barras de aluminio de la mochila, donde las asas, de esta forma, en el aeropuerto protegeremos cualquier cosa a la ida o la vuelta del viaje. Seguiremos llenándola por el grado de importancia, así si necesitamos algo lo cogeremos rápidamente, bien por arriba o por debajo, sin necesidad de sacarlo todo.
PARA LA SEGURIDAD DE LA MOCHILA O BOLSOS EN LOS AEROPUERTOS
2º.- FALSIFICACIONES, CAMBIAZOS Y ESTAFAS
¿A quién no le han engañado en alguna compra y le han vendido gato por liebre? A todos nos han engañado alguna vez en estos viajes y creo que te duele más, porque muchas veces no tienes forma de volver a la tienda “a saludar” a quien te hizo la estafa.
Hay verdaderos profesionales de la estafa, del cambiazo y de las falsificaciones. Algunas falsificaciones son muy difíciles de detectar, como por ejemplo las esmeraldas. Las esmeraldas de Colombia son famosas, pero ¿quién es el que entiende y distingue si son buenas o malas estas piedras preciosas? Muy difícil, ya que será una de las piedras preciosas más falsificadas. Tú llegas a la tienda o joyería en Cartagena de Indias (Colombia) y vas a comprar unas esmeraldas con toda ilusión y luego te enteras en España que son falsas o de pésima calidad. Yo creo que lo mejor es no preguntar, entregar el regalo y sonreír a tu pareja como si te hubieras gastado una fortuna.
A parte de las esmeraldas, las falsificaciones hoy en día se dan en todo tipo de productos. Puedes comprar un bolso falso en una tienda de primera o este mismo bolso en un mercadillo en cualquier sitio. Lo bueno es que son perfectos y no los distingues ni por sus acabados. Lo mismo pasa con las copias de relojes de marcas carísimas, o con tallas de madera que te dicen que son de ébano y luego son de otra madera similar, con muebles antiguos que no lo son, con el marfil, que aunque se sigue vendiendo, pese a estar prohibida su venta en casi todo el mundo, te lo ofrecen como auténtico marfil y sólo es hueso tallado, y en definitiva la tecnología y la imaginación de la gente ha hecho que las falsificaciones sean un negocio y para otros, los clientes, una forma de obtener algo, aunque sepas que es falso, y que de otra manera no podrías comprarte.
Podemos llegar a detectar algunas falsificaciones y otras son muy difíciles salvo que seáis expertos.
ALGUNOS CONSEJOS PRACTICOS PARA LAS FALSIFICACIONES.
Una de las maderas más falsificadas y más caras es el ébano. Esta madera preciosa se da en varios continentes, pero el más valioso es el de África. Esta es una madera que se caracteriza por su color negruzco. Lo curioso del árbol de Ébano es que la corteza es blanca o color crema y el corazón es negro. Es de una dureza muy alta, pero se puede tallar muy bien. Una de las cosas para detectar si es auténtica es que en la talla suelen aparecer trozos de la corteza blanca, aunque también la pueden pegar a la madera falsa. Para ver si es ébano o no, primero tenemos que ver que la madera no sea negra del todo, que sea un negruzco con veta, que sea muy pesada, y que al golpearla en alguna parte fina con el dedo u otra cosa, notemos que suena a duro, a macizo, tiene un sonido especial. Normalmente los vendedores, en una figura o talla suelen pegar en la base, que es donde saben que tu vas a mirar, un trozo de ébano auténtico para que veas que al rallarlo es negro ¡Cuidado con esto!. Si puedes raspar o con una navajilla hacer una muesca en otro sitio, detrás de las orejas, en el pelo, el sobaco de la figura o en un sitio que no sea la base, y que no te vea el vendedor, mejor. Toda talla luego tiene su cera, patina o aceite de color oscuro, como todas las maderas son tratadas, pero observad que esa madera no sea casi pintada de negro. En un pueblo de Santander, estaba en un mercado medieval, de una feria, y me paré a ver unas figuras de ébano por curiosidad y para ver si eran de verdad, y cuando cogí una de ellas, la miré y me dice a continuación el vendedor: “son de ébano”. Este chico era español y había comprado esa mercancía a unos africanos. La verdad es que esta vez no pude callarme y le dije al chico joven que eso no era ébano, que el ébano era más pesado y que éstas estaban tintadas de barniz oscuro casi negro y no tenían veta, ni nada. Le hice una prueba en una figura pequeña que me dejó este chico, eran todas iguales. A medida que iba haciendo los raspados y se lo iba probando, éste se sorprendía cada vez más y se iba encendiendo por minutos. Yo creo que todas eran falsas, de madera blanca, no sé que madera pero no era ébano. El chico cerró el chiringuito y se fue a buscar a sus ex-amigos. Esto es muy normal. Una última cosa sobre el ébano. Tenéis que saber que hay más maderas casi negras muy parecidas al ébano, una de ellas la vi en Panamá, era la madera de coco, muy dura, pesada y casi del mismo color.
Pero a parte de falsificar esta madera, muchas veces lo que te venden y ofrecen son auténticas tallas de ébano. El engaño viene en el cambiazo. Esto es muy típico de Kenia y muchos países africanos. En Kenia compré una mesita con patas plegables impresionante, que era a la vez un tablero de ajedrez, de ébano toda ella, de unos 60x40 centímetros y 10 de altura, sin las patas. Cuando estaba finalizando la venta, y estábamos llegando a un consenso en el precio, me dice el vendedor que “OK”, que está de acuerdo con el precio final que le digo pero, que le tengo que invitar a una cerveza en el bar de al lado, me pareció raro, pero…. Nos estrechamos la mano y me dice el hombre que vayamos a tomar la cerveza ya, mientras su compañero de timos, me envuelve la mesa para que no la pase nada y no se golpee en el viaje, ¡qué buena gente!. Al muy sinvergüenza le dije que primero la envolviera delante de mi y luego me tomaba la cerveza. Al oírme, éste se enfadó muchísimo, e insistió otra vez y esta vez el que se enfadó fui yo. Me quedé pegadísimo y sin quitarla ojo mientras todos me miraban con mala cara hasta que acabaron de envolverla. Luego no quiso tomar la cerveza. Si me llego a haber ido con el simpático me hubiera traído una copia falsa. Estad al tanto.
Los relojes, bolsos u otros productos de primeras marcas en los mercados negros, mercadillos o zocos de todo el mundo se saben que son falsos, entre otras cosas por un reloj de 6000 € que en el mercado negro vale 30 o 60 €, algo no esta bien, pero eso si, es perfecto en todo lo que le veáis exteriormente, salvo en su maquinaria, que se atrasará y se romperá antes de 6 meses. La piel de los bolsos te la queman delante de ti, para que veas que es cuero o piel, y es casi seguro que así sea, pero de baja calidad, ¿Quién lo sabe?. Mirad siempre de un bolso que los acabados, pespuntes y cosidos sean de buena calidad, que las asas aguanten bien y que los dorados o plateados, si los tuvieran, no sena pintados a mano, que las cremalleras no estén rotas o cierren mal, miradle de arriba abajo y por dentro, y si no os gusta o no esta en buen estado, que os den otro u os devuelvan el dinero, tanto en la tienda o en un mercado. El comprar ropa, relojes o bolsos falsos dependerá de la mentalidad de cada uno, si no te importa llevar algo falso perfecto, si no, estate atento que alguna te colaran. Si que es cierto, que es difícil distinguirlos salvo que sepas mucho.
Las alfombras o tapices de seda, se distinguen por que son más difíciles de quemar o dañar con el fuego. Sobre todo las alfombras, que las falsifican con hilo plástico, que al tacto es similar o difícil de distinguir al ojo inexperto del turista, pero si que se queman con más facilidad. Una vez en Marruecos había visto a un vendedor de alfombras en una tienda cogerme el cigarrillo, echarlo a la alfombra y pisarlo y no paso nada. Era un kiling de seda. Eso mismo hice yo en Mauritania, en una tienda de alfombras y cuando le dije al comerciante que si podía apagar el cigarro en ella, con intención de hacerlo se me puso blanco, y eso que el mismo me lo dijo, pero no pensó que lo fuera a hacer. Era falsa, luego me enseño otras en las que si podía hacerlo. Estos productos debemos de estudiarlos no por su parte bonita si no por el reverso o por los extremos, coger los hilos y quemar con un mechero uno de ellos, si se queda redondo como cuando quemamos un plástico esa alfombra de seda es falsa, pero si el vendedor es honrado te hará la prueba él. Se dice que las alfombras Tuaregs, Bereberes o Nómadas son autenticas por que solo tienen flecos en un lado. También se pueden fabricar de esa forma y no estar hechas mano si no en una factoría. Solo se que con lo que se tarda en hacer una alfombra a mano y las miles que puede haber en una tienda no me cuadra, pero lo cobran como tal.
Los muebles vendidos como viejos también son fáciles de falsificar, con anilinas, barnices, tintes, productos para envejecer la madera, imitando la carcoma con puntas finas clavadas que luego son sacadas, el paso del tiempo se hace royendo los bordes de la madera, o poniendo manecillas metálicas envejecidas, etc. Deberemos de dirigirnos a la parte trasera del mueble, ver si sus puntas o tornillos son nuevos, que han podido ser restaurados, ver sus acabados, su madera, que por esta parte trasera, al rasparla un poco, se ve si la madera es nueva o ya tiene tiempo. Distinguir las maderas ya es más difícil. Si es roble, la madera es más clara, si es nogal más oscuras, si es teca más rojiza, si es pino es más clarita, pero de todas estas hay mil clases de variantes en cada país y mil maderas similares. Fijaros solo si os gusta el estilo y lo que compráis, que le saquéis un buen precio, que os le embalen bien y que por su puesto, por el esfuerzo de traéroslo, que al menos os compense la compra por tener un estilo diferente a lo que puedas encontrar en España o que el precio sea muy bueno.
El marfil lo imitan con el hueso. El marfil tiene prohibida su venta afortunadamente desde hace años y en casi todos los países, pero lo furtivos cazadores y los desesperados vendedores en el mercado negro lo siguen vendiendo. La diferencia es que el marfil tiene anillos y el hueso no, pero tienen el mismo color. Si os fijáis en una talla de marfil o en un colmillo diseccionado tiene anillos que marcan el crecimiento del cuerno o colmillo. Los falsificadores tallan el hueso y te lo ofrecen como marfil. Fijaros que tenga anillos la figura, si no es falsa. No debemos de comprar estos productos ya que estaremos fomentando el furtivismo y la muerte de rinocerontes, elefantes y otros animales.
Puñales, espadas de guerreros, escudos, cuchillos. Muchos de estos productos que les venden como viejos, no lo son. Solo tenemos que ver las empuñaduras, el hierro, su filo, el acabado, para ver si esta hecho el año pasado o el siglo pasado. La tienda marcara un poco si es falsa o no, pero no os fiéis. Sobre todo, si el puñal o similar es imitando a viejo, compradlo si os gusta, quedara bien en vuestra casa, pero sobre todo, si sabemos que no es antiguo, como nos están intentando vender, no paguéis mucho precio y recordarle al vendedor que ese producto no tiene el tiempo que dice y se lo demostráis, aunque no os de la razón.
3º.- SEGURIDAD Y ROBOS,
Este será el mayor de los motivos para fastidiarnos un viaje o darnos un buen susto. Muchas de las cosas que voy a contar son pura lógica y prevención.
Prevenir es la palabra clave en este apartado de robos y seguridad.
Lo primeo es la información de un país. Yo tardo meses en organizar mi viaje, por que viajo solo con mi mochila, y tengo que ser más cauto y previsor que si voy acompañado. Desde luego tardo mucho en organizar mi viaje por que necesito recopilar datos sobre el país al que voy a ir. Investigaré sobre los diferentes recorridos que puedo hacer, las tribus o etnias que puedo visitar, los medios de transporte que voy a utilizar para llegar a ellas, en canoa, en bus, en tren, etc. Me informo de la religión que tienen, y esto me dirá bastante de como es ese país, si es budista ya tengo más cosas a mi favor. Leo artículos en Internet, que es mi mayor fuente de información. Busco lo que ofrecen las guías y, sobre todo, las agencias de viajes de mi destino, también por Internet, consigo rutas de viajes y, de todo esto, saco un montón de datos de lo que quiero y voy a hacer. También obtendré información de como tengo que comportarme ante su sociedad, con sus costumbres, con las compras, de las mujeres, su vestimenta y tradiciones, las comidas, etc.
Me decía un amigo siempre que nos veíamos “El cementerio esta lleno de valientes”. No se si es cierto, por que te puedes morir o te pueden matar en cualquier sitio, pero si se, que si a un viaje por nuestra cuenta e incluso organizado, decidimos salirnos de la ruta y darnos un subidón de adrenalina, ¡cuidado!, nos puede salir muy caro. La experiencia que tengamos en estos viajes de aventuras o por países latino americanos, asiáticos, africanos o por el Brons mismamente, marcara un antes y un después en nuestro comportamiento, pero nunca sabremos como nos vamos a comportar ante una situación u otra. He oído muchas veces la frase: “yo voy por todos los lados y nunca me ha pasado nada”, y yo digo a esa frase “hasta que pasa”. Tarde o temprano nos pasa algo, pero la experiencia nos hará reaccionar de una forma o de otra y esto hará que las consecuencias sean más positivas o negativas. Hace unos años en el norte de la India decapitaron a dos turistas, madre e hija. ¿Que estarían haciendo o donde estarían, para llegar a esos extremos? Yo como viajero, he pensado muchas veces en esas dos pobres mujeres y no lo entiendo. La India no es un país violento hasta ese punto, pero no sabemos que pudo pasar para llegar a decapitarlas. Hace poco, en Borneo, en la selva profunda, estaba fotografiando unos monos, estilo Macacos, no se bien su nombre, tendrían unos 60 centímetros de altura, más o menos, y de repente uno de ellos echo a correr por un tronco caído al ras del suelo hacia mi. Los monos son muy peligrosos, tienen dientes muy grandes y mucha fuerza. Cuando le vi correr hacia mi me asuste bastante pero lejos de salir corriendo, que hubiese sido lo peor, mi instinto me hizo tranquilizarme, abrir los brazos y abalanzarme hacia él gritándole. Todo fue en dos o tres segundo, pero dio resultado, el mono se quedo paralizado mirándome. Hice esto por que me acorde de que a un perro le podías asustar, bien abriendo un paraguas o levantando los brazos y gritando. No se lo esperan. Y eso creo que fue lo que paso. Tuve suerte, pero es la experiencia la que me hizo reaccionar así, el haber estado en situaciones muy difíciles muchas veces. Y es a lo que me refiero en este párrafo. Nunca sabemos como vamos a reaccionar y solemos hacerlo de manera que nos sorprendemos mucho a nosotros mismos.
Debemos de tener cuidado a quien nos juntamos, con que grupo vamos, en que religión o secta nos metemos. En la India hay miles de sitios raros y diferentes, cientos de religiones, sectas, grupos, y sobre todo de líderes carismáticos que tienen palabras estupendas para nosotros. Tened la cabeza fría para entrar en cualquiera de estos grupos y ver si os conviene y si su filosofía va con vosotros.
El miedo va a ser nuestro aliado. Le dije una vez a un chico que me acompaño en uno de mis viajes por la India: “que si tenía muchos huevos que se quedara en España”. Con esto di a entender que la valentía incontrolada o compulsiva se paga muy cara en muchos países, sobre todo en Latino América, que para mi es uno de los continentes peores para viajar o más peligrosos. Son los que menos escrúpulos tienen para robarte, secuestrarte o matarte. El siguiente en inseguridad es África, que en muchos países de este continente es todo un polvorín de un día para otro, aunque ahora esta muy tranquilo. Por lo demás el resto es más o menos seguro, hay de todo.
Hay que tener cuidado con ciertos turistas que nos encontraremos por el camino. Para mi, el más peligroso es el que tiene un perfil joven o a veces no tan joven, mochilero y bastante colgado. Ese turista algunas veces no es de fiar, debido a que su desorganización, falta de dinero y recursos, le hace a veces desesperado y en busca de una victima. No nos va a agredir físicamente, no lo creo, pero si se intentará aprovechar de nosotros y del dinero que llevemos. En este tipo de viajes de aventura es muy fácil encontrar a este personaje, pero no el la selva, desierto o en algún pueblecito perdido, estará en las ciudades, en la zona en la que se muevan los guiris.
Tenéis que saber que los robos en estos países en donde los timos, los cambiazos, las falsificaciones son el día a día, son muy poco frecuentes, me refiero a los robos a mano armada o atracos, salvo en algunas capitales de Sudamérica, como Lima, Caracas y Bogota. En África o en los países Asiáticos, entendiendo por Asia continental a Iran, Arabia Saudita, Turquía, India y China, Japón, y demás, los robos son muy raros en el día a día. Al turista le respetan, entre otras cosas por que las consecuencias son muy graves para el ladrón en el caso de que nos robara, y no os digo nada si ese robo es a mano armada. En Kenia me contaba un guía, que estaba impresionado por que en España, si alguien mataba a otro, salía en unos años por buen comportamiento de la cárcel y si robaba, casi ni entraba. Me decía que en su país, el robo a un turista se pagaba con la cadena perpetua y si el robo fuera a mano armada, como había pasado meses atrás, les fusilaban tras un juicio rápido. También me contaron esto en Iran. Un país en donde por desgracia esta en 2º lugar de ejecuciones por año, aunque no salga en la tele como las ejecuciones americanas. Allí si robas, te encarcelan o te cortan las manos y si matas ni te cuento. Estos son unos bestias.
Debemos de tener cuidado en las ciudades grandes. Allí se concentra mayor población, mayor paro, más necesidad a falta de pan y mayor delincuencia. Un buen consejo es, salvo que haya cosas que ver importantes, siempre ir en excursión o visita organizada, no estar callejeando mucho en estas ciudades grandes, es más fácil ser carne de cañón aquí para robos, hurtos u otras cosas, pero también es cierto que hay ciudades que hay que estar varios días para verlas y disfrutarlas. Ciudades como Hanoi, que estuve hace dos años, todavía hoy se puede andar muy seguro por sus calles, pero me comentaba un amigo hace poco que en la capital de Vietnam, en Ho Chi Min, la seguridad empieza a faltar por las calles de esa ciudad tan poblada, de por si, ya están acotados para el turista muchos barrios o sectores de la gran urbe. A medida que pasa el tiempo y la gente se acostumbra a los turistas y sus abusos, por que a veces somos tremendos, se va perdiendo el respeto al mismo y eso es malo para todos nosotros.
Otro robo es el robo en cuadrilla, que puede ser de diferentes formas. Una de ellas es cuando de repente te viene una prole de niños a pedirte lo que sea, limosna, comida, etc. Te tocan tantos niños a la vez que no te das cuenta que te están limpiando ¡que suerte!. Quiero pensar que hemos sido cautos, que habéis seguido estos consejos y que no llevabais nada en los bolsillos, por que si no a estos niños tan simpáticos tenéis que agradecerles que ahora tengáis menos peso encima. El punto positivo sería que al menos comerán unos pocos gracias a vosotros. Esto se suele dar en Marruecos, países musulmanes, en la India, en Tailandia y alguno más.
Otro tipo de robo en cuadrilla, es cuando en un paso de cebra o lugar muy concurrido, entre varios te rodean, como si estuvierais entrando en un concierto. En ese roce disimulado te han abierto la mochila, si la llevas en la espalda y te han robado. Esto lo vi en Cartagena de Indias cuando paseando con un amigo me di cuenta que en un paso de cebra, en donde había mucha gente, algo me llamo la atención, como que estaba pasando algo. Una cuadrilla de chicos de unos 30 años rodearon a mi amigo, como quien no quiere la cosa y entre la confusión de la gente y lo bonito que era todo, le habían abierto la mochila. Cuando yo llegue para agarrarle y sacarle de ese grupo de gente, justo tenían la cartera con los billetes a la vista. Hubo suerte esa vez, llevaba mucho dinero encima, otro error.
Otro robo es cuando te manchan y te intentan limpiar, y a veces lo consiguen de verdad, pero la cartera. Otras veces y esta es muy utilizada, es que en los mercados africanos, zocos o en otros lugares tremendamente concurridos, entre los golpes y roces nos han cortado con una cuchilla, cuter o bisturí la mochila, la cartera o el bolso y nos han robado.
Otro robo o mejor dicho hurto, es cuando comiendo, cenando o simplemente tomando algo al aire libre, dejamos la mochila en una silla junto a nosotros o peor aún, a un lado o en frente. En esos momentos veremos a una persona haciendo “futin”, pero en esprin, y casualmente veremos como sus manos se enganchara a nuestra mochila o bolso y siguen con su esprin, pero esta vez más rápido, y encima se pierde entre las calles. Nos ha robado y esta vez por despistados. Otro fallo.
PARA EVITAR ROBOS O SUSTOS, DEBEMOS DE HACER VARIAS COSAS IMPRESCINDIBLES.
¯ Ser prevenidos y la mochila de mano en un mercado o zoco la pondremos por delante de nosotros.
¯ Llevaremos poco dinero, esto lo he repetido ya, pero no me importa decirlo otra vez, hay cajeros por todo el mundo y podemos pagar con tarjetas de crédito. Llevad poco dinero encima. Para eso también están los cinturones falsos, que ya os lo he comentado en el apartado de dinero.
¯ Cuando nos sentemos en una terraza, todas las mochilas de mano tenéis para atarlas, con un clip o algo, a la silla, o pillad la mochila entre vuestros pies, o metéis una pierna por el asa o un asa metida en una pata de la mesa. No es ninguna bobada, no nos cuesta nada hacer esto y estaremos previniendo.
¯ Si la mochila de mano tiene varias cremalleras y en algún compartimiento tenéis algo de valor, otro error salvo que sea imprescindible, es aconsejable poner un candado o algo que no facilite la apertura.
¯ No llevar nada en los bolsillos de valor, salvo que tenga botones. El velcro no sirven, te lo abren entre roce y roce.
¯ Cuando vallamos a pagar en metálico no enseñemos toda la cartera o el bolso al vendedor, sed discretos, que no os vea lo que lleváis. Siempre hay gente mirando más hábiles que nosotros y en cuanto nos descuidemos, ya sabéis.
¯ Si llevamos bolso debemos de llevarlo pegado a la pared, no dejaremos sitio al ladrón para darnos un tirón y nos es igual llevarlo en un lado u otro.
¯ La documentación si no la podemos dejar en el hotel la guardaremos en una riñonera plana en la cintura, pero por dentro de la ropa o del pantalón, yo la llevo así, o colgada del cuello, pero por dentro de la camisa o camiseta. La documentación que llevaremos encima solo ha de ser lo más valioso, que es el pasaporte, los billetes de avión, las tarjetas de crédito, algo de dinero y otras cosas que creáis importantes y que no abulten. Nunca nos separamos de la documentación, ni la guardamos en la mochila o bolso. Si nos roban, que no sea esto.
¯ Dejaremos la documentación original más importante en la caja fuerte del hotel, pasaporte, billetes de avión, y lo que creamos oportuno de valor y saldremos con fotocopia de lo que hemos dejado, pero luego al facturar en el hotel que no se os olvide en la caja fuerte de la habitación.
¯ Es bueno tener fotocopiado todo lo más importante, desde el pasaporte hasta las tarjetas de crédito, los billetes de avión, contrato de seguro de viaje, direcciones, etc.
¯ Un truco muy bueno, aprovechando las nuevas tecnologías actuales, es colgar en tu correo electrónico toda tu documentación. Lo escaneas o que te lo hagan, y adjuntas a un archivo, tu pasaporte, direcciones de interés de amigos, familiares, embajadas, teléfono de asistencia en viaje, billetes de avión escaneados y con los números bien claros, etc. No sabéis lo bien que viene. ¿Qué os han robado la documentación?, no hay problema, solo tenéis que ir a cualquier oficina de Internet que hay en todo el mundo y en cualquier pueblo, por pequeño que sea, e imprimirlo y al menos tenéis algo para empezar a tramitar de nuevo todo. Por este medio, el de Internet, es un medio fiable, que no se pierde nada, salvo que lo estropeéis o borréis vosotros.
¯ No seas ostentoso. Si tienes es un reloj nuevo, que te encanta y quieres enseñarlo, espera a tu vuelta de viaje, o te durara poco, a parte de que te pueden dar un susto a ti o a tus acompañantes por un posible robo o atraco. Lo mismo con las joyas, cuanto más discretas valláis mejor.
¯ Con la ropa sed igual de discretos, o estaréis diciendo a los que tienen pocas ideas, y las pocas que tienen, las tienen malas, que vosotros tenéis dinero.
¯ En el taxi, ya lo he dicho en otro capítulo, cuando entremos, no soltamos las bolsas o la cartera o mochila de mano, por si se nos olvida. Es muy frecuente dejar a un lado lo que llevemos y luego al pagar, en unos segundo se ha ido el taxista, no intencionadamente, y nos hemos dejado todo o parte.
En muchos países desarrollados y con Embajada Española no es problema si nos roban la documentación importante, a parte del tiempo que nos hagan perder no pasa más, pero en otros países no es tan fácil. Podemos perder aviones o al grupo con el que vamos de viaje, por este inconveniente tan frecuente.
Las embajadas son muy útiles para cualquier español. Ellos te tramitaran el pasaporte otra vez, te darán asistencia jurídica si la necesitaras, te repatrían en caso de muerte, si quieres comprar allí algo importante, terrenos, casas, o lo que sea, ellos te asesoran y te orientan. Incluso te pueden dejar dinero, que a tu vuelta tienes que devolver, y muchas más cosas. Si no hubiera embajada Española y hubiera otras de la Comunidad Europea, podemos acudir a esas en caso de urgencia.
A veces no es por un robo, es por el extravío de la mochila, la maleta o por que se nos olvido en la cafetería. ¡Para mataros! Nunca perderemos de vista nuestro equipaje, ni en el taxi, ni en el banco del museo que acabas de visitar, ni en ningún lado.
En los hoteles es difícil que nos roben por no decir casi imposible. Cuanto mejor es el hotel más difícil es esta circunstancia. Muchas veces creemos que son robos y en realidad son pérdidas o despistes nuestros. Montaremos el número en el hotel y sospecharan de una señora de la limpieza, que es muy buena gente, y que como mucho, de vez en cuando, se echa un poco de crema o potingue de la señora de la habitación. En Camboya, en Siem Reap, en un hotel de tres estrellas. Cuando subía a mi habitación después de desayunar, había un señor dando parte en recepción, o mejor dicho, montando un escándalo por el robo de un dinero que tenía en la mesita de su habitación y que al volver del desayuno ya no estaba. Casualmente las señoras de la limpieza estaban en mi planta, también la del señor, vecino de habitación, cuando desayunábamos. Hay quedo la cosa. Por la noche me encontré al conserje y le pregunte por el escándalo de esa mañana y me dijo que el señor había encontrado su dinero y que no se lo habían robado, que lo había metido en un sobre suyo. Me imagino que pediría disculpas a todo el mundo.
Es más probable el robo en las Guest House o pensiones por África, Asia o Latino América, pero aún así sucede muy pocas veces. Pero si sucede, no será del personal de esa pensión. La gente empleada no es tan tonta, como para robar a un turista y que se le caiga el pelo, y además son muy buena gente, que se ganan la vida de esa forma tan honrada. Es más probable el robo por otros turistas u oportunistas de la zona. Los cerrojos son muy malos y las puertas se abren con toda facilidad. Debemos de prevenir y no dejar nada a la vista en este tipo de hoteles baratos. Debemos de cerrar las mochilas o maletas con nuestros candados, es mejor prevenir que lamentar. Llevad con vosotros una bolsita de cinchas o bridas de plástico, y cuando creáis oportuno unid dos cremalleras con la brida o lo que queraís, es imposible de abrir salvo que se corte esta. Son muy útiles, sobre todo en los viajes.
No es la primera vez, que he tenido que dormir en estas pensiones arrimando la cama a la puerta, debido a que esta se abría con toda facilidad. Otras veces, como en Monte Cristi, al norte de la República Dominicana, frontera con Haití, en una pensión tuve que meter una navaja entre los pestillos de la puerta por que habían desaparecido y no tenia ningún tipo de cerrojo. En Birmania, en Mandalay, tuve una experiencia más fuerte. Estaba solo en este viaje y al llegar a esta ciudad me busque un sitio para dormir. Le dije a un taxista que me llevara a hotel barato y este me llevo al de sus amigos, lo normal. Pregunté el precio y me enseño mi habitación, por que así se lo pedí al dueño del hotelito. Esta, estaba al final de un largo pasillo, cosa que me extrañó, pero tenia mucha luz, estaba pintada de color vede, tenía una cama grande de dos por dos, lo normal en ese país, y aire acondicionado. Me fui a dar un paseo, ya que era temprano y al volver por la tarde e ir a mi habitación, me encuentro el largo pasillo muy concurrido. Estaba lleno de chicas birmanas, un poco ligeras de ropa, pero no le di importancia. Ya me dio mala espina, cuando en mi habitación, sobre las 19 horas, cuando me preparaba para ir a cenar, llaman a la puerta y me encuentro a una de las chicas que me decía que si me hacía algún favor, ya me entendéis, la dije que no lógicamente, las mujeres me gustan mucho, pero a estas las tengo mucho miedo y respeto, en otro capítulo os explico por que. Por la noche empezaron a intentar entrar en mi habitación y de vez en cuando las oía como se acercaban y me movían el pomo. Como encima la cerradura era malísima y sin cerrojo, pues con la tensión que tenía en esas circunstancias, tuve que arrimar la cama a la puerta y aguantar, hasta que se cansaron de intentar abrirla y de llamar para charlar conmigo, entre otras cosas. Al día siguiente cogí mi mochila y me fui a otra parte más segura y un poco mejor.
Muchas veces el coste de una estrella a dos o tres, es muy pequeña, sobre todo si lo traducimos a euros, y desde luego lo ganas en seguridad, que es lo más importante.
Toca hablar de la seguridad para las cámaras de fotos y los equipos electrónicos que podamos llevar, discman, walkman, mp3, cámaras réflex y digitales, cámara de video, tele objetivos, anteojos, etc. Todo esto tiene una salida tremenda en el mercado negro, por lo que es objetivo principal de los simpáticos de la calle, es decir de los ladrones. Si vamos mostrando a todo el mundo que llevamos una Nikon Reflex Digital D70 , por ejemplo, una cámara que vale 1200 € con objetivo, y la llevamos en el cuello bien a la vista, lo que conseguiremos es que a alguien le interese también las fotos que estáis haciendo y quiera coger la cámara para verlas, pero en su casa. Pasa lo mismo con el resto del equipo, solo tenemos que ser discretos. Yo llevo una cámara buena, llamativa para cualquier ladrón, una cámara reflex digital y unos objetivos de diferente lentes de aumento. ¿Cómo las llevo? No llevo nunca un estuche de los convencionales de fotógrafo. Llevo una cartera, tipo colegio, con asa que se cuelga por el hombro, con diferentes cremalleras y clips de seguridad, es nueva. Esta cartera es genial, guardo los objetivos con sus estuches o si estos ocupan mucho, quito los estuches y los meto en calcetines de montaña. Llevo una cámara de video pequeña metida en un trapo azul y la cámara de fotos en otro trato verde de algodón y todo bien colocado dentro de la cartera. Así llevo muchos años. Paso desapercibido a ojos de la gente. Cuando saco la cámara de video o de fotos, la saco con el trapo que no guardo posteriormente. Saco la foto o gravo y la vuelvo a meter en su cartera o en el trapo, depende si la voy a seguir usando. Todo esto lo hago cuando el pueblo o ciudad donde me encuentro no me da mucha garantía. No quiero dar oídos a sordos, pero al final me he acostumbrado y lo hago ya en todos los sitios a donde voy en el extranjero. No me cuesta nada, si no voy a sacar fotos o voy a estar un trayecto corto sin hacerlas, guardarla en su trapo y llevarla en la mano atada a mi muñeca, por si tengo que sacar alguna foto rápida, o bien la guardo en la cartera. En el aeropuerto es mi equipaje de mano, junto con mi mochila de mano, lo que no facturo y siempre, mi cartera de colegio, pasara desapercibida frente a curiosos. Por supuesto, que casi se me olvida decíroslo, nunca la pierdo de vista, ni se la dejo a nadie, ni la dejo en el maletero del taxista, ni en una silla, si no en mis pies, ni la facturo en el aeropuerto, no me separo de ella, por que hay gente que me abra visto meter y sacar cámaras de ella. Solo prevengo, para mi es una rutina y sobre todo por que perder eso me costaría un disgusto, por perder las fotos el viaje y su video y por el dinero que perdería.
Cuidado con los monos. No os creáis que estoy loco. Los monos en la India son muy peligrosos y uno de los mayores ladrones que hay. Detrás de este animal tan simpático, hay un cómplice que suele ser un tendero de fruta u otra persona que ha enseñado al mono, que es listísimo, a que si le trae ropa, bolsos, cámaras y más cosas, obtendrá comida fácil. De por si, en muchos sitios puedes ver señales de advertencia o avisos en las guías para el turista de que ¡Cuidado con los monos!. Esto no solo se da en la India si no en más países en donde el mono convive en las ciudades con las personas.
Uno de los peligros de viajar solo es que en muchos lugares, pueblos apartados, ciudades en donde se penaliza brutalmente al ladrón, es más rentable para el delincuente, matarte y luego robarte, que atracarte y que le identifiques. Es por ello por lo que muchas veces me toca decir que voy a tal sitio por que me esperan unos amigos. O por lo que nunca quedo con un taxista que no conozca, que me haya encontrado en la calle, para desplazarme de noche o de madrugada. Si le necesito para ir a algún sitio a esas horas, al aeropuerto por ejemplo que suele estar lejos de las ciudades, que lo llame el hotel, por que un desconocido me puede hacer una encerrona, es difícil, pero ha pasado y yo solo pienso en mi seguridad.
No os olvidéis que al final somos nosotros, los turistas, los que perdemos, ante la falta de seguridad por nuestra parte. Si nos roban el equipo de video o de fotos, nos roban nuestro viaje. Nuestros recuerdos y alegrías, y aunque les llevemos en la cabeza, no es lo mismo.
Si te roban, denúncialo. Te servirá por si encuentran lo que te han robado. Deja tu dirección de hotel, te la pedirán de todas formas, y guarda la denuncia y las facturas de lo que tengas que comprar, para demostrar al seguro que te han robado y para que luego la compañía te indemnice por ello, todo esto si tienes seguro, que te lo aconsejo, vale muy poco dinero y te ayudará bastante.
UN SEGURO DE VIAJE, lo que te cubre, a parte del robo, que siempre es una cantidad pequeña, el metálico y equipos electrónicos, para evitar la picaresca, están excluidos de las coberturas. Cubre las repatriaciones por enfermedad o accidentes, la vuelta urgente a tu ciudad, el envío de un familiar a donde estés y los gastos de hotel para él, la asistencia médica, la asistencia jurídica y más cosas muy interesantes y suficientemente importantes, que por unos euros, entre 30 € a 180 €, depende del destino y el tiempo, nos pueda dar una cobertura y mucha tranquilidad. Además siempre te dan un teléfono de urgencia para llamar desde donde estés.
4º.- PERSONAJES EN LOS VIAJES
Para un viajero como yo los personajes o las personas son lo que me mueve a viajar, es decir, mi turismo es para conocer a las distintas personas y personajes que pueblan esos países de Dios. Me parece lo más interesante y motivador el conocer otras personas, culturas, etnias, pueblos, tribus y países solo por ver sus costumbres, hábitos sociales, políticas y personajes pintorescos de cada país. Lo de pintoresco me refiero para los ojos de un turista extranjero como yo, cuando voy a esos lugares, y lo digo con todo el respeto. Puedo llamar personaje curioso o pintoresco a un Jainita de la India o un Chaman o curandero de una tribu. Es una forma cariñosa de nombrarles. Y de estos y otros os voy a hablar en este punto, pero más tirando a los cuidados y consejos cuando nos encontremos a ciertas personas.
Quiero hablaros de los taxistas, guías, oportunistas, personas de aeropuertos, profesionales del timo y contaros diferentes historias que os sirvan de aprendizaje, por que son reales.
La gran mayoría de los taxistas en todo el mundo se ganan a base de horas y esfuerzo su dinero. Son grandes profesionales que tienen que estar horas y horas al volante, pero hay un pequeño porcentaje de estos señores que dan mala fama a este sector y que para los turistas son altamente peligrosos. Los timos y artimañas que utilizan estos malos taxistas son muchos, pero los más comunes en todo el mundo son, el cobrarnos de más por el trayecto que le hemos solicitado, darnos más vuelta o coger una dirección con su coche de más recorrido o si no conocemos la ciudad, llevarnos directamente al atasco, todo para cobrarnos más. Esto sería lo suave y como en España o en Europa no se regatea, ni se cierra el precio, salvo trayecto muy largo, pues nos lo tenemos que comer. Pero el problema para nosotros es cuando nos encontramos un taxista en la India, Asia, latino América, África, en el que nos vemos abocados al regateo por que no funciona el taxímetro o no quieren encenderlo para nosotros, así nos cobran más.
Lo más habitual que nos puedan hacer es engañarnos con el precio si no regateamos o no cerramos correctamente el precio. Si es así, y ya lo he dicho en otro punto, tendremos problemas en lugares en el que nosotros tenemos poca seguridad. Son auténticos depredadores y psicólogos a la hora de captar su presa. Son excelentes regateadores y algunos muy peligrosos. En todos mis viajes siempre topo con alguno así, no falla, quieren hacer el mes a mi costa o a la costa de otro turista. Este año mismo, negocié un precio dentro de la ciudad de Kuala Lumpur para que me llevara a un trayecto, pero antes me llevó a ver a un amigo suyo, que no era tal, si no que pregunto, ya que yo se lo pedí, que quien me podía llevar a Kota Bharu, a 600 kilómetros de allí. Cuando, después de regatear con otro taxista para que me llevara al día siguiente y luego negociara él su comisión por llevarme allí, me llevo al destino que le dije en un principio y me quiso cobrar más del triple. Lógicamente tuve unas palabras con él, pero ya me saco el doble. Lo peor es que se ponen violentos, te pueden vocear, salir del coche gesticulando y eso asusta bastante y lo saben, más cuando vas solo. Lo mejor cuando te pase esto es llamar a la policía cercana, muchos de estos sinvergüenzas saldrán pitando.
También existe lo contrario, muy buena gente, que te darán más de lo que tu les pidas. Estos son los mejores guías y si te portas bien con ellos te recompensaran llevándote a sitios que nunca verías en un viaje organizado. Es ideal este trasporte, a parte de barato, para conocer una cuidad o para que te lleven a otros lugares cercanos. Si vas con más gente, menos de cuatro personas, te lo aconsejo e incluso solo.
Me acuerdo en Monte Cristi, al norte de la República Dominicana, frontera con Haití, que cuando llegue allí en autobús, me aloje en un hotelito muy cutre en el que el dueño era el Alcalde y taxista, a parte del más rico del pueblo. El hombre muy agradable, cuando le dije de mis intenciones de pasar a Haití se ofreció a llevarme a la frontera a unos kilómetros de este pueblo. Ese mismo día, por la tarde, me llevo a dar una vuelta con su coche, a presentarme socialmente a su gente cercana. Lo gracioso fue que primero me llevo a conocer a su amante, una chica joven y guapa, la cual pensé que era su esposa, pese a la diferencia de edad, por la forma de entrar en su casa y de tratarla. Esta vivía en el centro del pueblo, pero me equivoque cuando a continuación me llevo a una escuela de monjas y me presento a otra mujer, que trabajaba de profesora en ese centro. Esta tenía cara de buena persona, con más edad y me dijo que era su esposa y que la quería mucho, que era muy buena. Lógicamente yo alucinaba, pero parece ser que es un poco la cultura de allí. Luego, este amable taxista me llevo a su casa, me presento a toda su familia, me invito a una cerveza, pero antes de llegar sucedió lo mejor. Dando una vuelta por el pueblo, una señora nos asalta en un paso de cebra y le pregunta al taxista, que donde esta su marido, que no esta en casa y que sospecha que esta en la casa de otra mujer. ¡Madre mía! Esa mujer quería matarlo, ya que este señor era su marido y sospechaba, correctamente, que estaba en casa de otra mujer. Este señor era inválido, como me dijo mi amigo taxista, iba en silla de ruedas, pero era el letrado del pueblo y el más rico y un partido así, allí no se deja pisar por otra mujer. Tuvimos una especie de carrera por las calles del pueblo, de unos 10.000 habitantes. Íbamos de casa en casa, preguntando si este estaba allí, pero este personaje, según este amigo nuevo, tenía más de una amante. Al final no le localizamos pero me imagino que cuando le pillara su esposa muy rápido no iba a salir de casa para librarse de unos buenos palos. Al día siguiente me llevo hasta la frontera de Haití y logre cruzarla por que él mismo soborno a un soldado de Haití. La historia sigue, pero esa es para otro capitulo.
Los guías. Estos son muy recomendables si queréis ver en profundidad una cuidad, pueblo, centro histórico o conjunto de monumentos. Es raro encontrar una persona con pocos conocimientos de la materia que se hable, suelen ser muy profesionales en ese sentido. Si vais a viajar en grupo, varias personas os lo recomiendo. El precio, dependiendo del país es más o menos caro, pero entre unos pocos compensa su servicio, si lo que queremos es profundizar sobre un tema. Por todo el mundo hay guías para todos los idiomas, incluido el Español, solo tenéis que solicitarlo en el Hotel o en la oficina de turismo. Muchas veces la crítica hacia este sector viene por su afán por vender o llevarse comisión de las tiendas a las que lleva al turista. Este problema de búsqueda comisiones extras se dan siempre en los guías de agencias de viajes. En este sentido son personas egoístas, aunque les entiendo por que se tienen que ganar la vida, pero esto les hace malos consejeros a la hora de preguntarles por donde tenéis que ir, que tengan una buena calidad precio, a comprar algo que queréis. Siempre os intentará acompañar a la tienda donde el se lleva comisión, aunque no le veáis entrar, él cuando os deje ira a por su comisión. Esto también encarecerá vuestra compra. He conocido pocos guías que no quisieran llevarme a alguna tienda para comprar. Uno de estos le conocí en Varanasi, India. Quería conocer el Ganjes profundamente y contraté un guía en el hotel. Este señor de unos 60 años fue muy profesional y me dijo que él no me iba a llevar a comprar nada, yo no le creí por que todos te dicen lo mismo, pero así fue.
Los oportunistas de calle. ¿Que decir de estos personajes? Nos les encontraremos por todos lados, algunos con malas intenciones, casi todos. Son personas que se ganan la vida, de forma ilegal, con el turista. Estos hacen de guías, aunque no lo sean oficialmente, te acompañan para buscar algo en concreto, aunque acabaras en su tienda o la del que le paga, auque no quieras ese producto. Cuidado con estos personajes. Una vez más he de advertiros que siempre hay buena gente en estos personajes, pero unos pocos, hacen que nos pongamos en guardia cuando les veamos. Me acuerdo de un personaje muy agradable y buena persona en Fez, Marruecos, que se ofreció para hacernos de guía dentro del laberinto de la parte antigua de esta ciudad, una maravilla, por cierto. Este señor no era guía oficial, se llamaba Mojamez, y nos ofreció sus servicios de guía, a las puertas de la ciudadela, con mucho cuidado por si le veían los policías. Mojamez a penas tenia dientes de las palizas que le habían dado en la cárcel, esto cuando estaba el régimen dictatorial del anterior Rey de Marruecos. Aceptamos sus servicios, un amigo y yo, por que nos cayó bien. El nos dijo que no podía ir junto a nosotros, por que si le verían los policías u otros guías le denunciarían y que el iría un poco más adelantado, solo unos pasos y nosotros le seguiríamos. Eso hicimos, nos enseño malamente la parte antigua de Fez y rápidamente nos llevo a la tienda en donde el se llevaba su comisión. ¿Cómo nos tomamos esta historia? Pues nosotros pensamos que ayudábamos a una persona y no nos importo que no nos enseñara perfectamente la ciudadela. Pero esto es normal en muchos países.
Luego esta el oportunista pesado, que le dices que te lleve a tal sitio y te lleva al que quiere él y a su tienda. Aparece el personaje que le dices mil veces, -por favor no quiero ir a ninguna tienda- y en cuanto te descuidas ya estas en otra. Y te enfadas y ellos ya te ponen mala cara y les tienes que terminar diciendo que se vallan a paseo. Pero estos engaños son lo normal en muchísimos países. Si tienes experiencia, personalidad o carácter, te les quitaras del medio, pero por desgracia la gente es temerosa y no se atreve a darles la cara. Les hay que se enfadan si no les compras nada en las tiendas a las que te llevan. No debes dejar que te coman la partida, siempre con educación y sin gritos, esto es importantes, por que hay países que los gritos se interpretan de muy mala forma, despacharemos a nuestro acompañante oportunista. No debemos nunca perder la compostura. Si vemos que se pone pesado o violento, esto es difícil, buscaremos un policía o simplemente entraremos en una tienda y le diremos al dueño que llame a la policía, aunque solo con decir a un personaje de estos que vas a llamar a la poli, se irán rápido.
Uno de los primeros personajes a tener en cuenta, para no bajar la guardia, que nos encontraremos, será en el aeropuerto o estaciones de tren, sobre todo en el primero. Cuando lleguemos en un viaje fuera de grupo, por nuestra cuenta, estaremos, posiblemente, si es la primera vez que vamos a ese país, como pez fuera del agua. Puede que lleguemos a ese aeropuerto a horas muy malas, de madrugada o de día, es igual, en el momento en el que salgamos a la calle o simplemente fuera de la parte privada del turista y entremos en la parte pública del aeropuerto, habrá muchísima gente que nos haya puesto los ojos encima. Nos entraran, se ofrecerán y depende de lo que queramos, nos marcharemos o nos pondremos a regatear un destino en concreto. Estos suelen ser casi todos taxistas ilegales, van con su coche. Lo mejor para combatir, el que será casi seguro nuestro primer timo, si es la primera vez que vamos a esa ciudad, es llevar el hotel concertado, o decirle que queréis ir a un hotel de la guía y se lo enseñáis, o si sabéis el idioma se lo decís. Os preguntara si tenéis reserva, decid que si. Si le decís que no, el os dirá que conoce un hotel mejor y más barato. Os llevara a saber donde. El precio será, casi seguro, un poco más caro que el resto. Ellos saben con dos palabras que le digas si has estado y conoces los precios de esa ciudad. Estas perdido, pero asume, como lo asumimos todos, salvo que alguien te haya informado de los precios días antes de llegar, que ese trayecto será tu primer contacto con la realidad de tu viaje.
Hay otros personajes peores en los aeropuertos. Son los timadores, los sin vergüenza y ladrones. Intentaran robarte el equipaje, aprovecharse de ti y depende de lo listo o lo torpe que estés, correrás más o menos peligro. Cuidado con esta gente. No te dejes llevar por ellos, por la pena que te den o por lo enrollado que puedan ser contigo. Son personas con hambre, con mucha necesidad y siento decirte que eso les hace muy peligrosos. Tú tienes más que ellos solo en tu maleta o mochila, y ellos lo saben. Saben que en el mercado pueden vender muy bien lo que a ti te roben, y robos hay siempre. De lo robos hablaremos en otro punto.
También os digo que si en el primer trayecto del aeropuerto al hotel, os gusta el taxista o conductor que os esta llevando, por que os da confianza y le veis buena gente, proponedle lo que queréis hacer en vuestro viaje, si no lleváis nada organizado. Es mejor cerrar un trato con la persona que os guste y os de confianza, que poneros a buscar. En estos viajes yo creo mucho en el destino. A mi personalmente me gusta y siempre me he dejado llevar por la persona de mediana edad, tirando a los 50 años. Suele ser padre de familia, muy asentado y pasado de vueltas, sin ganas, el 99% de ellos, de meterse en líos. Para mi, este perfil a sido genial siempre. Me han dado más de lo que yo pedía y por supuesto, cuando esto ocurre, yo tengo que dar más de lo que le dije y no dinero siempre. Puedo dar le regalos, ropa o muchas cosas. Sed generosos o “el viaje”, el destino, os castigara por abusar del que tiene menos que vosotros.
Lo que te puedes encontrar por hay es la gente que utiliza la pena y su desgracia para venderos cosas o llevaros consigo o sacaros algo. Solo os digo que tengáis mucho cuidado, que no os fiéis ni os dejéis llevar por la pena o desgracia de esa persona o a lo mejor las consecuencias serán peores. No digo que no ayudéis si creéis necesario, pero muchas veces no es bueno, podéis complicaros la vida y si dais a un niño es mejor darle a escondidas que públicamente. En la India o África si damos a un crío nos pueden rodear otros muchos y en ese rodeo robarnos. Yo dejé de dar caramelos y globos a niños públicamente, hace unos años, por que se mataban entre ellos. Al final, salvo en tribus pequeñas, de pocos críos, se lo daba a un sacerdote, monje, gurú, profesor, o jefe para que lo repartiera. Una vez, hace unos 10 años en Gambia, vino un crío de unos 6 años, con la ropa rota, precioso y muy simpático, a pedirme limosna. Yo siempre llevo en mi mochila ropa para regalar y saque de mi mochila una camiseta para el crío. Al dársela y a los pocos segundos, una piedra de unos 5 centímetros le impacto en la espalda al niño. Había metido la pata hasta el cuello, ya que los demás crios también querían ropa o lo que fuera y así lo demostraban. Tuve que cogerme al niño y montarle en el bus conmigo hasta alejarle e esos bestias amigos suyos. Me di cuenta que tenia que seleccionar mejor la entrega de lo que llevaba.
Me encontré a un español en la India tirado en las calles de Pushka. El, al verme, me debió de identificar como español y me llamo. Al ver que reaccionaba le confirme mi nacionalidad y me acerque hablar con esta persona, que rápidamente me contó media vida suya. Entre otras cosas me dijo que era de Sevilla, de unos cuarenta años, que había estado en la Legión Española y en las milicias Colombianas y que había matado a mucha gente, me decía todo esto mientras me enseñaba todos los tatuajes que identificaban a estos grupos militares. Ya empezábamos mal. Me contó que se estaba muriendo y que tenía cólera. Que hacía años que no veía a su familia, mujer e hijos, y que quería conseguir dinero para volver a España. Cierto o no, con los antecedentes que tenía esta persona te obliga a ponerte en alerta. Esto es una supervivencia y muchas de las cosas que me decía mi instinto las interpretaba como falsas. La conclusión, y yo nunca bajo la guardia en estos viajes, es que me fui y le deje hay. No me cuadraban muchas de las cosas que me decía y tenía la sensación de que nada de eso existía, de que solo quería sacarme dinero.
Algunas veces los personajes más peligrosos son los propios extranjeros. Algunos son muy hábiles, vividores y experimentados viajeros. Te encuentras de todo, casi siempre gente muy interesante que viajan solos, en pareja o en grupos de tres o cuatro personas. Viajan por libre sin nada organizado. La gente se aloja en todo tipo de hoteles, albergues, guest house, pensiones, hoteles, etc. Para mi, el sitio más peligroso para encontrar al oportunista colgado es en las guest houese o albergues, que tanto hay en todo Asia e India o las pensiones de Latino América. Debemos de extremar las precauciones con la persona que se nos acerque en estos lugares. Gente agradable, que casi siempre lo único que quieren es charlar e intercambiar experiencias, quieren ligar, quieren información o simplemente compañía. Esto es lo normal, pero… hay otro tipo de turistas que van sin un duro a buscarse la vida y si pueden sangrarte o ir sacando unas pelas “con el sudor del den frente” mejor. Este año en Kuala Lumpur, callejeando por China Town, me viene un Ingles un poco bebido y me para. Me dice que ayer tenía una mochila y que la dejo en un pub, que es donde están siempre por la noche y donde estaban todas las prostitutas, y que la perdió. Que estaba tirado, todo esto en medio de la cera, y que si le daba algo de dinero para no se que, no le entendí, se le iba la lengua. Cuando le dije que no le entendía nada, que no hablaba Ingles, algo muy socorrido que utilizo mucho y que viene genial cuando quieres quitarte a alguien de encima, un comprador o como este personaje, el tipo me insulto con su lengua sucia y se largo. Si tienes que dejarte llevar o ayudar a toda la gente que te encuentras por el camino, de verdad, estáis perdidos.
Pero hay veces que si te involucras. Es el caso de la periodista alemana, en Camboya, que me pidió ayuda para cruzar el país en barca (de este transporte ya hablé antes) y que tenia miedo de llegar al puerto se Shien Reap, en donde la habían informado de lo violenta que se pone la gente, al llegar allí este transporte, para coger o captar a los turistas que van por libre. La verdad es que esta chica alemana tenía razones para tener miedo. En un país como este en el que la mujer no vale nada y no la respetan, una mujer sola extranjera tiene que extremar las precauciones, aunque lo normal es que no te pase nada, tienes que tener cuidado. Esta chica me contó que estaba escribiendo artículos para una revista Alemana (como otra mujer que conocí en Birmania) y que si la podía ayudar a cruzar el puerto ese y compartir el taxi hasta la ciudad. La dije que si, me dio muy buen rollo y no me suponía nada. Tras seis horas de viaje tremendo y yo con una insolación de caballo, llegamos al embarcadero y eso fue la guerra. Era increíble, la gente se mataba por cogerte la mochila, esto hace unos años, por llevarte a su hotel o pensión, por llevarte en su coche, por ser tu guía para ver las ruinas de Ankor, para todo. La dije a esta chica que se agarrara fuerte a mi brazo, que se sacara todo de los bolsillos y que la riñonera se la metiera por dentro de los pantalones y que por nada soltara su mochila, yo iba con mi mochila grande y la de mano. Tuve que empezar a salir a golpes de allí. La gente te agarraba, te gritaba, te insistían, abría más de cien personas, y no te dejaban pasar, así que me abrí paso con los brazos y empujando sin cortarte un pelo o de allí no salíamos. Yo peso unos 100 kilos y soy alto, eso me ayudo, si esta chica hubiera ido sola, otro la habría sacado, pero fijo que lo hubiera pasado mal. Al final, fuera de la multitud, compartimos taxi y nos fuimos a comer y nos despedimos, íbamos por caminos diferentes. Esta chica no estaba bien, devolvía todo y tenia diarrea. La di unas medicinas que llevaba y luego la reñí, por que me contó que la gente la increpaba y que los hombre la miraban mal. Esta mujer de unos 30 años, a parte de rubia, tenía mucho pecho y lejos de ir discreta llevaba una camiseta ajustada blanca, estaríamos a unos 40 grados. Yo estaba encantado de verla, pero la verdad es que así no se va a un país tan conservador como Camboya, por eso la reñí. Tenia que respetar su cultura, por su bien. Luego me dijo que si la acompañaba a fotografiar unos templos, fuera de ruta, a una hora en coche de Shien Reap y otro tanto andando. La volví a reñir. Camboya es un país lleno de minas y de mutilados por ellas y esta quería salirse de la ruta, en contra de todo los consejos que te avisan del peligro de las minas, para ir a fotografiar un templo, como si no tuvieras bastante con los templos de Ankor. Esta chica no tenía mucha cabeza pero estaba empeñada en ir, así que allí acabo nuestro encuentro. Cada uno que mire por su supervivencia, pero luego te enteras que ha habido un suceso a un turista o un accidentes y me gustaría saber quien ha sido más imprudente.
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